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CULTURA Y ESPECTÁCULOS

Una trepidante versión flamenca de 'Romeo y Julieta'

El Nuevo Ballet Español, que dirigen los bailarines y coreógrafos Carles Rodríguez y Àngels Rojas, entusiasmó en el III Festival Shakespeare de Santa Susanna (Barcelona). Pusieron tanta energía y pasión que fue necesario ampliar el aforo.

La expectación que había despertado, la noche del pasado domingo, la actuación del Nuevo Ballet Español en el marco de la programación de III Festival Shakespeare obligó a los responsables de la organización a añadir una fila de sillas a las butacas ya existentes en el Espai Jardí de la Masía Can Ratés de Santa Susanna (Barcelona) para hacer frente a la numerosa demanda de localidades por un público deseoso de ver bailar a la joven compañía de flamenco que dirigen los bailarines y coreógrafos Carles Rodríguez y Àngels Rojas y que no suele prodigarse por tierras catalanas.

Este Romeo y Julieta con coreografía de Carles Rodríguez, -que también encarna a Romeo-, y firma el guión junto a Guillermo Pasani, es un trabajo con un ritmo trepidante que destila energía y juventud. Es una versión que sintetiza en una hora y veinte minutos los acontecimientos más importantes de la célebre obra del dramaturgo inglés de forma fluida y sin lugar para el lirismo; las escenas de amor son apasionadas como su baile. El espectáculo comienza por el final de la obra, es decir, por la muerte de sus protagonistas.

Una novedad en este montaje es que Tibaldo está interpretado por una mujer, la bailaora y cantaora Mara Rey

En escena se muestra un féretro en que yacen Romeo y Julieta, ambos interpretan un breve paso a dos.

Tras este instante que tiene el efecto de flas, la acción transporta al espectador a una bulliciosa plaza de una ciudad medieval, donde Montescos y Capuletos viven enfrentados. A partir de este momento los fragmentos corales brillaran con fuerza, especialmente el formado por el elenco masculino que zapatea con un dinamismo insultante. Los pies de los bailarines acarician el suelo con insolencia. Su baile es altanero y varonil.

Bellas se exhiben las frases coreográficas en la que los hombres encadenan tras el zapateado varias piruetas con exactitud matemáticas para terminar en un attitude clásico. Esa forma como el coreógrafo mezcla con habilidad el flamenco con la danza clásica, la danza contemporánea y la danza española enriquece el montaje al que le da un toque de modernidad.

Desde el principio del espectáculo destacó por su entregada interpretación Àngels Rojas -codirector de la Compañía-, que encarna a Mercuccio, su fuerza de seducción junto a la de Carles Rodríguez como Romeo lograron poner la carne de gallina al espectador con sus ejecuciones a dúo.

Una novedad en este montaje es que Tibaldo está interpretado por una mujer: la bailaora y cantaora Mara Rey; otra cosa que diferencia este Romeo y Julieta de otras versiones es el papel activo que juega Fray Lorenzo, el fraile que casa a la pareja de enamorados y que aquí está interpretado por Fredo Belda. Su intervención bailando pura danza contemporánea y breakdance para cortar la intensidad del drama resulta como mínimo imaginativa. Mayte Bajo en el papel de Julieta se muestra como una mujer pasional que vive intensamente el amor de Romeo. La escena del balcón es ágil y nada empalagosa. Olga Pericet es una convincente Ama.

Otro de los atractivos de este montaje es la música del compositor Pablo Suárez, que es interpretada en directo por ocho músicos. Las vibrantes notas del piano, junto a las de los violines, guitarras, violonchelo y percusión acentúan el tono pasional de esta versión.

Carles Rodríguez y Mayte Bajo.
Carles Rodríguez y Mayte Bajo.JOAN RIBOT

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