Cierre
El polideportivo municipal de Barajas ha cerrado por vacaciones el día 1. La única piscina pública que hay en el distrito queda fuera de uso, precisamente, en agosto. Ya pasó en años anteriores, pero los usuarios del distrito teníamos esta vez la esperanza de que los responsables municipales actuaran con lógica.
No ha sido así. También nos veremos privados del gimnasio, las pistas polideportivas y las canchas de tenis y de pádel, en este mes en que los vecinos del barrio, sobre todo los estudiantes, están de vacaciones y pueden hacer mayor uso de las instalaciones.
Este mes de apagón deportivo en el distrito se ha visto precedido por varias semanas de funcionamiento a medio gas, con la taquilla cerrada por las tardes los fines de semana. En septiembre, cuando el verano comience a despedirse y nuestras obligaciones laborales apenas nos dejen tiempo para la actividad física, volveremos a hacer cola para sacar un abono, conseguir plaza en natación o reservar pista de tenis.
Unas colas, por otra parte, incomprensibles, en una época en la que puedo sacar un billete de avión a Tokio desde la pantalla de mi ordenador, pero tengo que desplazarme en persona al polideportivo, a determinadas horas y con el dinero en efectivo, si quiero reservar una pista de tenis. Y a precios no precisamente baratos.
