Las posibles piedras en el camino de la expansión

Las reservas que algunos expertos formulan respecto a la valoración y los riesgos de Corporación Dermoestética ya se recogían en el propio folleto de su OPV, que incluye un catálogo de las posibles amenazas que podrían torcer la marcha del negocio. La compañía advierte, por ejemplo, del riesgo de que la demanda de cirugía estética se ralentice una vez que alcance determinado nivel: "Podría estabilizarse, lo que probablemente llevaría a una reducción de los márgenes de negocio y, además, dificultaría la política de crecimiento del Grupo, basado en la constante apertura de nuevos centros". La compañía prevé acabar este año con un total de 95 centros en España, el Reino Unido e Italia, 37 más que a finales del año pasado. Precisamente, la expansión en Italia es una de las grandes incertidumbres de la compañía. El país transalpino generó unas pérdidas de 10,41 millones de euros en 2004, fundamentalmente por gastos de puesta en marcha, derivados de la reforma de locales y las campañas publicitarias. Corporación Dermoestética asume que "es previsible que, al menos durante el ejercicio 2005, dichas pérdidas se mantengan". Sólo está previsto alcanzar el umbral de rentabilidad en 2007, aunque, como se precisa en el folleto, "no se puede asegurar que la sociedad vaya a ser capaz de implantar en Italia su modelo de negocio y de conseguir los mismos resultados en Italia que los obtenidos en España y Portugal". La compañía también hace referencia a la estricta reglamentación comercial italiana, que establece un número máximo de centros de cirugía estética por ciudad y la distancia que deben mantener. El documento de la salida a Bolsa de Corporación Dermoestética reconoce otros riesgos relacionados con el propio desarrollo del negocio. Por ejemplo, cita las consecuencias de la dificultad a la hora de encontrar profesionales, como cirujanos, odontólogos, oftalmólogos o anestesistas. Tampoco obvia el riesgo de posibles negligencias médicas o intervenciones defectuosas, así como el impacto que tendrían en la opinión pública "incidentes graves o daños corporales severos o la muerte como resultado de una intervención estética".