Maragall asegura que las divergencias con Esquerra no afectarán a su Gobierno

El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, apareció anoche en la televisión pública catalana convencido de que a finales de septiembre el Parlamento catalán aprobará el nuevo Estatuto de Cataluña y que las divergencias de criterio con Esquerra Republicana, evidenciadas en las votaciones de ayer en comisión, no afectarán a la estabilidad del Gobierno que preside.

Maragall insistió en que se manifestaba como presidente de la Generalitat y, por consiguiente, evitó cualquier comentario que pudiera molestar a sus socios del tripartito. Así, rehusó pronunciarse sobre la apelación a los derechos históricos introducida por Esquerra en el texto estatutario con la aquiescencia de CiU.

"Yo prefiero otras fórmulas para blindar las competencias, como por ejemplo que en caso de duda prime el derecho catalán (...) porque Cataluña no es una excepción en el Estado como lo es el País Vasco", manifestó. No obstante, se quejó de que la actitud de CiU haya arrastrado a los republicanos hacia posiciones "más extremas". "Las soluciones de última hora siempre son arriesgadas", subrayó, pero apeló a los dictámenes del Consejo Consultivo para dilucidar la constitucionalidad del texto. En este sentido, reclamó que todos los partidos acaten la decisión de este organismo.

Maragall dijo que el Congreso aprobará el Estatuto que salga del Parlamento pero que "esta historia se acabará con la reforma de la Constitución".

Respecto al líder de ERC, Josep Lluís Carod, Maragall reveló que hace unos cuatro meses le ofreció regresar al Gobierno catalán, pero no como conseller en cap. Posibilidad que Carod rechazó.