Maragall se querella contra la Cope por injurias

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pasqual Maragall, presentó ayer una querella a título personal por injurias contra la cadena Cope, propiedad de la Conferencia Episcopal Española, por la emisión de la lectura de una coplilla en la que se aludía de forma explícita a supuestos hábitos etílicos del denunciante.

Los hechos que motivaron la querella tuvieron lugar el pasado 4 de julio dentro del programa La Linterna, que dirige y presenta César Vidal. En un momento de la emisión, un personaje de ficción llamado Fray Josefo pronunció una seguidilla en la que, tras declarar ser un ávido bebedor, estableció todo tipo de paralelismos entre su persona y la de Pasqual Maragall. Según el texto de la querella, "las seguidillas se dedicaban íntegramente a atribuir toda clase de borracheras al querellante", lo que ha motivado la acción judicial del presidente de la Generalitat.

La querella presentada ayer en los juzgados de instrucción de Madrid con fecha de 21 de julio solicita que se condene por un delito de injurias graves a César Vidal, al intérprete del personaje de Fray Josefo y a Radio Popular, SA, propietaria de la cadena Cope. Como resarcimiento, el querellante reclama "un mínimo de tres millones de euros" a los querellados, una cuantía que, según el texto, "se donará a la ONG Intermon-Oxfam".

"Campaña difamatoria"

A parte de la emisión concreta del pasado 4 de julio, el texto de la querella alude a la existencia de "una auténtica campaña difamatoria" de la cadena Cope contra la figura del presidente de la Generalitat catalana.

También lamenta que, tras la difusión de las presuntas injurias, ni el presentador del programa, César Vidal, ni los tertulianos que intervenían en aquel momento hicieran nada para "efectuar cualquier manifestación objetiva o racional" acerca del presidente Maragall. "Lejos de ello, se dedicaron a vilipendiarlo afirmando un hecho incierto: su supuesto apoyo a la candidatura olímpica de Nueva York", se afirma en el texto de la querella.

Maragall había desmentido previamente una noticia publicada en la página web de la candidatura de la ciudad norteamericana en la que se afirmaba que el presidente de la Generalitat había apoyado la designación de Nueva York como sede olímpica. "Claro es que los querellados no tenían el menor interés en comprobar la veracidad de dicha información, sino únicamente de menoscabar el honor de nuestro representado", afirma el texto.

El Juzgado de Instrucción número 34 de Madrid ya admitió a trámite la semana pasada una querella contra la revista Vanidades interpuesta por los mismos motivos por parte de Maragall.