Manda ovarios
Admirado señor director general de la Corporación Catalana de Radio y Televisión, don Joan Majó. Le escribo lo que vendría a ser esta carta abierta para advertirle, aunque tarde, del terrible y hasta tremendo error que han cometido con la destitución de Montserrat Minobis como directora de Catalunya Ràdio. Y si se lo digo no es porque yo ponga en cuestión su manera de manejar lo que los pijos llaman la "Corpo", aunque yo pensaba que este tipo de decisiones no los debían de tomar ustedes, sino el Consejo Audivisual de Cataluña. Si se lo digo es porque he leído las extraordinarias declaraciones de la gran Minobis en los diarios del miércoles. En estas declaraciones, la periodista afirma que en un primer momento fue "invitada a dimitir" de su cargo y, de este modo, a "irse por la puerta grande". Que ella contestó: "No me iré si no me echáis". Y que añadió: "Esto me lo proponéis porque soy una mujer feminista".
Verá, señor Majó. Con el poco tiempo que llevaba Minobis en Catalunya Ràdio, yo aún no me había formado ninguna opinión sobre su manera de gestionar la casa. Desde que inició su mandato, nuestra conversación más larga no había tenido lugar en los pasillos de la emisora, donde colaboro, sino en una peluquería -de nombre Tito- en la que ambas coincidimos un día haciéndonos la cabeza (cosillas de mujeres). Pero ahora, tras haber dicho que la echan por ser "una mujer feminista", no tengo ninguna duda: Minobis es un genio.
Sí, lo sé. Una persona menos inteligente que ella no usaría el nombre del feminismo en vano y daría todos los detalles de una acusación tan grave. Porque, si dices que te echan por ser feminista, tienes que demostrarlo con ejemplos. ¿Qué ha sucedido durante la gestión de Minobis para que ella pueda considerar que la destituyen por feminista? ¿Quiso pintar las paredes de lila y ustedes no se lo permitieron? ¿O tal vez dejó marchar al periodista Jordi Basté a la competencia por presentar un programa de fútbol, cuando el fútbol es un deporte sexista donde unos machos sudorosos persiguen una pelota sin tener en cuenta la paridad hombre-mujer? Desde luego, no creo que Minobis se refiera al hecho de haber contratado a mujeres para conducir algunos programas. Sé que no ha contratado a esas mujeres en cuanto mujeres, sino en cuanto estupendas profesionales.
Pero no todo está perdido, señor Majó. Si bien no podemos recuperar a Minobis, sí podemos destituir al director que usted acaba de nombrar, don Oleguer Sarsanedas. La razón es evidente. Como se puede comprobar a primera vista, Sarsanedas es de sexo masculino, cosa que le complica la vida en caso de mala gestión. Tampoco pertenece a alguna minoría racial o colectivo amenazado. Sólo es un hombre, el pobre. En cambio, yo, como también se puede comprobar a primera vista, soy una mujer. Y creo que, inspirada por el ejemplo de Minobis, soy la persona más idónea para dirigir el ente. Si bien me considero bastante inepta para el cargo, tengo una ventaja: me acabo de convertir al feminismo radical. Para demostrarlo, y si a usted no le molesta, rebautizaré la emisora Catalunya Cultura como Catalunya Dona. De este modo, si no cumplo las expectactivas, esgrimiré la bandera feminista. ¡Ah!, y por el dinero no se preocupe, que nos pondremos de acuerdo. Estoy segura de que usted es una persona sensible que podrá ofrecerme el sueldo que una mujer como yo se merece. Muchas gracias.
moliner.empar@gmail.com
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