La Policía Municipal denunciará a tres ediles por desobediencia
La trifulca entre vecinos y policías por la tala de 140 acacias en el paseo de la Virgen del Puerto acabó con tres agentes municipales y dos vecinos heridos. Pero también con tres concejales propuestos para sanción. La Policía Municipal ha denunciado a los ediles del PSOE Óscar Iglesias y José Manuel Rodríguez Martínez y a la portavoz de IU, Inés Sabanés, por un delito de desobediencia a la autoridad.
La causa de esta denuncia reside en que los tres políticos se unieron a varios vecinos y se parapetaron debajo de los árboles que iban a ser talados. "¡Unos concejales desobedeciendo a la autoridad..!, Y no a cualquier autoridad, sino al inspector jefe, José Luis Morcillo. ¡Es intolerable!", afirmó ayer el concejal de Seguridad y Servicios al Ciudadano, Pedro Calvo Poch. "Los concejales forman parte del Ayuntamiento y a través del pleno deben dar ejemplo y respetar a la autoridad", concluyó Calvo.
Para los denunciados, la cosa es diametralmente distinta. "Estamos en democracia y pensamos defender los derechos de los ciudadanos y de los vecinos de Madrid", afirmó Iglesias. "Simplemente nos hemos unido a los vecinos para preservar su seguridad, puesto que podían caerles trozos de ramas encima", aseguró Iglesias.
"Ilegalidad"
Sin embargo, la concejal de Urbanismo, Pilar Martínez, considera una "ilegalidad" que los tres concejales "hayan puesto a los vecinos en peligro e instigado a la gente" a montar jaleo por la tala de los árboles. Esta afirmación de Martínez fue duramente criticada por Sabanés, que manifestó: "Me parece de un maniqueísmo terrible y hace falta tener un sentido distorsionado de la democracia para acusarnos de incitar a los vecinos y justificar que se haya evitado un proceso de interlocución entre los ciudadanos y sus representantes". "Este es un conflicto que han iniciado los vecinos cuando han visto que empezaban a cortar los árboles de su calle sin que nadie les hubiera avisado, nosotros simplemente proponíamos que se paralizara la tala y se formase una mesa de diálogo en la que se le explicara a los vecinos el proyecto y posibles alternativas", concluyó Sabanés.
Sobre las siete y media de la tarde cayó la primera acacia de las que intentaban defender los vecinos. Pero lo que ocurrió ayer también es una cuestión de cifras. Los que protestaban, eran unos 300 vecinos. En el otro bando, alrededor de 100 policías municipales que dejaron aparcados en la calle y en las inmediaciones del lugar de la protesta más de 40 coches patrulla. En la calle de la Virgen del Puerto también aparecieron 5 furgonetas de antidisturbios del Cuerpo Nacional de Policía.
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