Camino hacia el mar
Viladecans y El Prat quieren convertir su litoral en una zona de ocio y turismo
La zona litoral del Baix Llobregat más próxima a Barcelona dará un salto cualitativo en dos años. Después de la entrada en servicio de la depuradora del Prat, que ha hecho practicables las playas, el Ayuntamiento de este municipio y el de Viladecans quieren dejar de dar la espalda al mar y convertir la costa en una zona de ocio y turismo.
En Viladecans, el acceso a la playa es "un viejo sueño", según el teniente de alcalde de Planificación Territorial, Carles Ruiz. La instalación de tres cámpings en una pineda al lado de la costa imposibilitaba llegar a ella sin antes pasar por Gavà. La opción de la gran mayoría de los ciudadanos es quedarse en esta población o bien acudir a Castelldefels para disfrutar del sol y el mar. Sin embargo, la ampliación del aeropuerto ha obligado a los empresarios a dejar libre el terreno. Dos cámpings ya han abandonado la zona y este verano será el último para el tercero.
Dos cámpings ya han abandonado la zona y para un tercero, éste será su último verano
Si bien la ubicación de los cámpings ha obstaculizado el acceso a la playa durante muchos años, también ha permitido mantener una gran extensión al margen de la fiebre del ladrillo. Según Ruiz, "Viladecans es la única población del litoral barcelonés libre de edificaciones".
Los terrenos son de Aena, que ha llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento para permitir la conversión de la zona en un parque lúdico con playa. El Ayuntamiento, que está redactando el Plan Especial, también está trabajando conjuntamente con la Dirección General de Costas para construir un paseo marítimo.
Asimismo, el esperado acceso a la playa desde el núcleo urbano se realizará mediante la construcción de una nueva carretera. Las obras empezarán muy pronto, cuando se realicen los trabajos de desvío de la autovía de Castelldefels, actuación necesaria para la ampliación del aeropuerto. Será el "camino hacia el mar", como lo nombran desde el propio Ayuntamiento de Viladecans. Tendrá calzada para los vehículos y un paseo arbolado con carril bici. El presupuesto del proyecto es de 3,6 millones de euros.
El consistorio de Viladecans también planea trasladar las actividades exentas de ordenación ubicadas en la autovía de Castelldefels. En este lugar, y ante la inexistencia de un planeamiento urbanístico, se habían instalado puntos de venta de autocaravanas, una hípica y dos pistas de karting. Sin embargo, estos equipamientos se encuentran a menos de los 500 metros de la costa, una zona que debe estar libre de actividad residencial e industrial, según marca el Plan Director de Costas de la Generalitat. El Ayuntamiento ha aprovechado la nueva ley para rehacer la fachada de la autovía. Ruiz señala que el planeamiento, actualmente en trámite, "limpiará" la zona y permitirá "la instalación de actividades de tipo turístico de bajo impacto", para recuperar el espacio para los ciudadanos. El teniente de alcalde señala un centro deportivo, actividades medioambientales y un equipamiento hotelero como algunas de las propuestas a implantar y que aportarían al consistorio nuevos ingresos. La zona protegida, que incluye el parque lúdico, suma un total de 300 hectáreas.
El parque lúdico que planea construir el Ayuntamiento de Viladecans en su costa será la continuación del que ya se ha proyectado en El Prat, que se tomará como modelo. Recién aprobado el Plan Especial urbanístico, empezará a construirse dentro de seis meses. Con una superficie de 90 hectáreas y tres kilómetros de longitud, unirá los humedales de la Ricarda y el Remolar, en cada extremo. Los terrenos son propiedad de Aena, que se hará cargo de su rehabilitación para el uso público como medida compensatoria de la ampliación del aeropuerto. El espacio contará con una pineda de 31 hectáreas, una porción de playa, una zona de bares y restaurantes, un pitch and putt, un espacio donde se realizarán actividades medioambientales y un aparcamiento. Para el teniente de alcalde de Medio Ambiente del Ayuntamiento del Prat, Sergi Alegre, el parque ofrecerá muchas posibilidades para el ocio de los ciudadanos, como "bañarse en el mar, descansar en la sombra de los pinos, utilizar las instalaciones deportivas, visitar los equipamientos de educación ambiental y descubrir los humedales a través de itinerarios de paseo".
Restauración de un lago
Concretamente, el plan prevé la restauración de un lago que en los años 70 se secó para instalar en su superficie el camping Cala Gogó, ahora desaparecido. Delante de la playa, con salida a un futuro paseo marítimo, habrá una zona de ocio donde se sustituirán los antiguos restaurantes por seis nuevos de 300 metros cuadrados cada uno y otro de 1.500 con base náutica. La casa Coderch, perteneciente al antiguo club de golf, ahora trasladado a Terrassa, acogerá un centro de educación ambiental y más restauración. La superficie que ocupaban los campos de golf servirán como zona de paseo y de actividades deportivas, que incluirá el pitch and putt. El teniente de alcalde de Medio Ambiente explica que de esta forma se continuará la tradición golfística que existe en el municipio, con dos entidades dedicadas a su práctica. Sobre la necesidad de agua para su mantenimiento, Alegre explica que "se continuará utilizando la del acuífero, en una zona muy cercana a la costa donde es salada". El concejal asegura que "es necesaria su extracción, como hasta ahora hacía el antiguo golf, para que su salinidad no penetre en las aguas subterráneas", de mayor calidad.
También se restaurará la pineda y se habilitarán caminos. Los visitantes podrán realizar excursiones, guiados por monitores que darán a conocer la biodiversidad de la zona.
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