Molestan los turistas
Cada fin semana nos apoderamos de buena parte de los pueblos y, de regalo, colapsamos las carreteras. Los barceloneses somos de los que más salimos por esos mundos.
Pero ahora, nos molestan los turistas. Nuestra economía funciona gracias a actividades terciarias que se benefician de las actividades relacionadas con el turismo, pero los turistas son buenos si son pocos, ricos y cultos. Queremos ciudades con poca gente, sin túneles ni cárceles, y donde no falte de nada.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.