Mas insta a Duran a expresarle en persona sus quejas sobre el funcionamiento de CiU

Si el líder de Unió Democràtica, Josep Antoni Duran Lleida, tiene alguna queja sobre el funcionamiento interno de Convergència i Unió debería comunicársela a su homólogo convergente, Artur Mas, o bien expresarla en los órganos de la federación nacionalista. Con esta reflexión, Artur Mas salió ayer al paso de las críticas lanzadas el lunes por Duran, en la ejecutiva de su partido, por el papel "virtual" que ejerce en CiU como secretario general y por la estrategia política y comunicativa de la federación. En Convergència, las palabras de Duran no sorprendieron.

En la ejecutiva de Unió del pasado lunes, Duran Lleida se despachó a gusto contra sus socios convergentes. Aseguró que en CiU es un "secretario general virtual", arremetió contra el portavoz de Convergència y responsable de estrategia electoral, David Madí, lamentó que el liderazgo de las negociaciones de la reforma estatutaria esté en manos de Francesc Homs y acusó a dirigentes de CDC de entorpecer su labor en el Congreso de Diputados como presidente del grupo parlamentario.

"A mí no me lo ha dicho en ningún momento y supongo que si hay algún problema, me lo dirá, porque hablamos muchas veces muy claro", manifestó Artur Mas en una entrevista a la emisora Com Ràdio. "Esto no significa", agregó, "que no haya nunca ningún problema. En todas las casas hay problemas, pero en estos momentos no me consta que haya alguno, al menos no se me ha dicho por parte de la dirección de CiU".

El jefe de la oposición y presidente de CiU restó importancia a las manifestaciones de Duran y negó que la estrategia respecto a la reforma del Estatut la tome unilateralmente Convergència. Según Mas, "está pactada y coordinada" entre Unió y Convergència y recordó que en la ponencia parlamentaria han participado la democristiana Núria de Gispert y los convergentes Francesc Homs y Ramon Camp.

"Todas las decisiones importantes en los últimos meses se han tomado de común acuerdo entre Convergència y Unió, por lo que no sé a qué vienen" las quejas de Duran. Frente a las críticas del líder de UDC, Artur Mas elogió el trabajo realizado por Francesc Homs, "una persona aceptada desde el comienzo y que está haciendo un trabajo excelente y magnífico desde el primer momento", señaló.

Precisamente, ayer el representante de Iniciativa per Catalunya en la ponencia, Jaume Bosch, sostuvo que las discrepancias en el seno de la federación tienen "mucho que ver con las dudas que CiU está mostrando a la hora de tomar una posición definitiva" ante la reforma. A juicio de Bosch, las tensiones reveladas por Duran "muestran una preocupante disparidad de criterios políticos dentro de CiU que explican las actitudes vacilantes".

En Convergència Democràtica, la palabras de Duran no sorprendieron por el contenido -"estamos acostumbrados a estas salidas", señalaron fuentes del partido- pero sí se lamentó el momento "inoportuno" en que las ha pronunciado, en plena negociación del Estatut.