"Ni las fiestas ni la vida se entenderían sin música"
La Orquesta Pablo Sarasate es toda una institución en Pamplona. Florentino Briones (Madrid, 1961) es el encargado de organizar a la agrupación y dentro de sus objetivos está recuperar el papel primordial que la orquesta ocupaba en las fiestas de San Fermín.
Pregunta. ¿Qué relación tiene la Orquesta Pablo Sarasate con los sanfermines?
Respuesta. Históricamente, fue Pablo Sarasate quien impulsó la creación de la orquesta para que le acompañase en los conciertos, especialmente de San Fermín. Aquí se traía a tocar a amigos de la talla de [Maurice] Ravel y los conciertos de San Fermín eran el no va más. Obviamente, ahora es muy distinto. Se llenaban los teatros e incluso se robaban las entradas o se falsificaban, porque todo el mundo quería estar dentro del concierto, incluso se pagaba para entrar en los ensayos. Ahora, nuestro papel es el de tocar las vísperas de San Fermín.
P. ¿Se entenderían las fiestas sin música?
R. No sólo los sanfermines, sino tampoco se entendería la vida. Todo es música desde que nacemos. Un niño golpea rítmicamente o hace ruido para crear música.
P. ¿Puede haber espacio para la Orquesta Pablo Sarasate en el programa festivo?
R. Parece que el ambiente es más adecuado para otro tipo de músicas o para charangas y bandas, pero la orquesta tiene algo que hacer para volver a ser protagonista. Si hace 125 o 100 años era el centro de los sanfermines, nadie sabe qué va a ser dentro de otros 125.
P. ¿Qué se podría hacer para devolverle ese papel principal?
R. Hay que buscar un hueco para que tenga actividad y sea algo popular y abierto; no queremos que se vea la orquesta como algo distante y lejano. La orquesta es capaz de hacer muchas cosas que no son estrictamente música clásica y llevamos a cabo conciertos con música de cine, por ejemplo, donde se ve que el público es mucho más joven, o con jazz, o acompañando a artistas como Joan Manuel Serrat. En la actualidad estamos tratando de poner en marcha un concierto con fuegos artificiales dentro de San Fermín. Sería una gran idea y el Ayuntamiento está interesado. Habría que solventar problemas de espacio y megafonía, pero hay otras ciudades que lo están haciendo, como Leeds [Gran Bretaña].
