El Estado ha demolido en un año 11 construcciones en la Costa del Sol

El Ministerio de Medio Ambiente ha demolido 11 construcciones en siete municipios malagueños en el último año para recuperar el dominio marítimo-terrestre en el litoral, según un comunicado del PSOE, lo que incluye chiringuitos, espigones, tramos de paseos marítimos u otras obras sin un título administrativo válido. Por el momento, sólo se ha aprobado el deslinde del 13% del litoral de la Costa del Sol, que comprende 170 kilómetros.

Según el comunicado de los diputados Miguel Ángel Heredia y Remedios Martel, en el litoral oriental se ha demolido el chiringuito Los Delfines, en Nerja, la estación de bombeo de Vélez-Málaga y el Espigón de la Cala en Rincón de la Victoria. En el litoral occidental, se han demolido cuatro construcciones en Marbella: el Espigón del Oasis, el Pantalán del Rey Fahd y dos torres del cargadero de El Cable. Además, se ha actuado para retirar el depósito del agua de Benalmádena, la cimentación de un antiguo hotel en Fuengirola, el Pantalán de Leyla, en Mijas, y el tramo de levante del paseo marítimo de Sabinillas, en Manilva.

Estos derribos forman parte del programa de recuperación del dominio marítimo-terrestre que desarrolla el Ministerio de Medio Ambiente a través de la Dirección General de Costas, que incluye la demolición de todas las construcciones existentes en el mismo que no estén amparadas por un título administrativo que las habilite para su ocupación. El dominio público marítimo-terrestre lo forman, además del mar territorial y las aguas interiores, la ribera del mar, que abarca las zonas de playa, las albuferas y los terrenos costeros hasta el lugar alcanzado por el mar en marea alta o hasta donde lleguen las olas en los mayores temporales conocidos, según la Ley de Costas de 1988.

De los 170 kilómetros de litoral malagueño, sólo se han aprobado hasta la fecha deslindes del dominio marítimo-terrestre en 22,3 kilómetros de costa, lo que supone únicamente el 13% del total. Otros 22,5 kilómetros están revisados y pendientes de aprobar, y el resto, más del 73%, están pendientes de revisión. Medio Ambiente ha realizado, según la nota, una programación detallada para realizar todos los deslindes pendientes de revisar, según la Ley de Costas de 1988, con el objetivo de finalizarlos en el plazo máximo de cuatro años.

Estos trabajos consisten en la delimitación física de los límites del dominio público, por lo que su realización "no sólo es una obligación legal, sino también una forma muy eficaz de protección y defensa de amplios espacios naturales situados en la zona de confluencia entre el mar y la tierra", y "una garantía de seguridad de ciudadanos y bienes frente al fenómeno de la erosión y retroceso de la línea de costa".