_
_
_
_
Reportaje:

La constancia del triunfador

Aritz Itxiosa, bronce en el último Mundial, compagina el taekwondo con la carrera de Ingeniería Industrial

Su caso dista mucho del deportista de hoy en día con gran presencia en los medios de comunicación, en muchos casos más preocupado por disfrutar del presente que por preparar su futuro. Aritz Itxisoa (Vitoria, 1981), medalla de bronce en el último Mundial de Taekwondo celebrado en Madrid, sabe que también hay otra vida después del deporte. Por ello, además de esforzarse sobre el tatami, también tiene tiempo para cursar estudios de Ingeniería Industrial en Bilbao.

Es el último producto con éxito de este deporte en el País Vasco, pero advierte de que detrás de él y de la vizcaína Ibone Lallana, también medalla de bronce en Madrid, el relevo es incierto. "El taekwondo es un deporte individual y requiere un sacrificio mayor que los deportes de equipo, pero los chavales de ahora se han vuelto muy cómodos", argumenta.

Itxiosa nació para el taekwondo cuando tenía sólo cinco años. Fue su padre, un antiguo practicante de esta disciplina, quien le inculcó la afición. Hasta los 13 años, lo compaginó con la natación y el fútbol, deporte en el que llegó a alinearse con la selección alavesa de infantiles. "Tenía que elegir, porque no podía con todo y el taekwondo me llenaba más", recuerda. Era la época de la irrupción de las artes marciales, deportes individuales que exigen más abnegación que los colectivos, porque los errores los paga uno mismo.

Cuando tenía 13 años, Aritz Itxisoa se proclamó campeón juvenil del País Vasco. Durante los tres últimos años, ha sido campeón absoluto de España en peso pluma (menos de 67 kilos). En el Mundial de Madrid del pasado mes de abril, perdió en semifinales (5-4) ante el surcoreano Myeng Seob, mediando ciertas decisiones arbitrales que no gustaron al público, pero se colgó el bronce.

Con esa misma capacidad de trabajo, este joven alavés compatibiliza los entrenamientos diarios con sus estudios de cuarto curso de Ingeniería Industrial. "Es complicado y exige un desgaste, pero se lleva bien si tienes ganas. Tengo claro que mi época para hacer deporte es ahora; puedo esperar para ser ingeniero", indica.

Su próxima meta es el campeonato de Europa, que se celebra el próximo mes de octubre y, a más largo plazo, su estreno olímpico en la gran cita de los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008. Para facilitarle su preparación, y gracias a su medalla de bronce, el programa ADO le otorgará en 2006 una beca por valor de 45.000 euros anuales, pero si quiere que se renueve hasta 2008 debe ir acompañada de buenos resultados.

Itxisoa e Ibone Lallana ejercen de avanzadilla del taekwondo vasco, pero el vitoriano no ve claro el futuro: "Los que competimos estamos a un buen nivel, pero no sabemos cómo va a ser el relevo. Todos los deportes son sacrificados, pero éste, más. Es individual, hay pocas competiciones, y siempre hay que estar muy bien. Y creo que los chavales de ahora son más cómodos, prefieren dedicarse al fútbol para ganar dinero".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_