Miles de personas asisten a la saca de las yeguas frente a la ermita de El Rocío
Miles de personas se concentraron ayer frente a la ermita de El Rocío (Almonte, Huelva) para presenciar la saca de las yeguas, una tradición con 501 años de historia que consiste en el traslado del ganado que durante el invierno ha vivido en estado semisalvaje en las marismas de Doñana hasta Almonte. Las yeguas quedaron recogidas a última hora de ayer en el recinto ganadero almonteño, donde serán sometidas a la tuza: los ganaderos, que reconocen a sus animales por el hierro, les cortan las crines y la cola, y los preparan para la feria de Almonte, que se celebra a partir del 29 de junio, festividad de San Pedro.
La saca de ayer contó con 600 equinos, 400 animales menos que en 2004, porque los ganaderos empezaron a recogerlas desde el pasado enero para darles de comer y beber, debido a la sequía. El presidente de la Asociación de Criadores de Ganado Marismeño, Fernando Mallorca, explicó que la saca se ha realizado esta vez en varias fases (comenzaron el pasado viernes) "ya que la mayoría de las yeguas están escuálidas". Además, se ha intentado cuidar más a los caballos, pues el año pasado fallecieron 22.
La saca tuvo un momento espectacular en torno a las 11.00 de ayer, cuando las yeguas pasaron por delante de la ermita de El Rocío, camino de Almonte. Este año, por primera vez, ha habido un pregonero de la saca, el profesor de Psicología de la Educación de la Universidad de Huelva, Manuel Acosta. La feria de Almonte está dedicada al mundo de los toros y a Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).
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