"La globalización está impulsando nuestra actividad"

A Excel, líder mundial de la logística, con 109.000 trabajadores en el mundo, la globalización le está sentando muy bien, comenta su consejero delegado, John Allan. En España, donde se sitúa entre las tres primeras del sector, la clave de su crecimiento para los próximos años es la esperada expansión del outsourcing, que muestra niveles de desarrollo inferiores a los de Europa, y la compra de empresas especializadas en los sectores farmacéutico, de la salud y del transporte marítimo de mercancías.

Pregunta. Ustedes son los líderes mundiales del sector logístico, pero en España aún no. ¿Aspiran a ser también los primeros en nuestro mercado?

Respuesta. Aquí estamos entre los tres primeros, pero estamos determinados a ser los líderes. Y ya estamos trabajando en ese sentido. Vamos a crecer orgánicamente y también a comprar. Ahora bien, dada nuestra dimensión ya no nos resulta imprescindible adquirir empresas grandes. Nos interesa comprar empresas de nicho interesantes que nos permitan ampliar nuestra presencia en sectores muy concretos. Es lo que hemos hecho en Portugal, donde compramos varias empresas especialistas en el sector de salud y farmacia.

"Soy optimista respecto a España. Creo que está en mejores condiciones de retener su tejido industrial que el resto de Europa"

"La situación de las infraestructuras logísticas en Europa no es muy buena que digamos, pero España no es de las peores"

P. Y ¿cuáles serían esos sectores?

R. En España tenemos que crecer en el sector de farmacia y salud (health care). También tenemos proyectos para el sector de transporte marítimo de mercancías en el que somos los sextos a nivel mundial y ahí pensamos actuar desde España. Ya estamos mirando la posibilidad de comprar empresas de este tipo en España.

P. ¿Cómo ve el futuro y las posibilidades de su empresa en el mercado español?

R. Excelentes. Es un mercado muy activo, con crecimientos del PIB superiores a los de Francia y Alemania. Además, hay muchas posibilidades de recorrido en bastantes áreas de actividad. Por ejemplo, en el outsourcing empresarial, que está en España a niveles más bajos que en Europa. Y según éste vaya creciendo, nosotros creceremos con él ya que el outsourcing exige más logística y logística más compleja.

P. La logística ha crecido estos años a tasas muy elevadas. Igual que su empresa. ¿Cree que será posible igualar este dinamismo en los próximos años? ¿Cuál es su estrategia para conseguirlo?

R. Estamos en un momento de crecimiento fuerte en el mundo y la mayor parte de los sectores con los que trabajamos habitualmente, las empresas de distribución, los fabricantes de productos de consumo, el automóvil, las farmacéuticas, siguen creciendo también a buen ritmo. Nosotros creceremos con ellos. En todos estos sectores hay grandes oportunidades. La globalización, que implica una creciente utilización de servicios logísticos, la expansión del outsourcing y la creciente complejidad de la cadena de suministro explican el recurso creciente de empresas como la nuestra y el fuerte crecimiento del sector, que ha evolucionado estos años a tasas anuales del 6% (nosotros, al 12%). La explosión de China, donde llevamos 20 años actuando, no sólo a nivel internacional, sino en el mercado doméstico, también nos está impulsando.

P. Citó la globalización como uno de los motores de la logística. ¿Por qué?

R. La globalización es una de las causas de que estemos pasando por un momento tan excepcional. Las empresas están deslocalizando, incluso en España, cada vez más su producción a Asia. El efecto principal es que la cadena de suministro es cada vez más compleja y difícil de manejar. Las empresas utilizan cada vez más los servicios y las expertises que la logística les puede proporcionar.

P. ¿Cómo evalúan ustedes, como operadores, el estado de la infraestructura logística en España? ¿Funciona o les crea cuellos de botella?

R. En general, la situación de las infraestructuras logísticas en Europa no es muy buena que digamos, pero España no es de las peores. La situación está relativamente despejada. Las carreteras no alcanzan la congestión que en otros países y los puertos son seguramente de los menos descongestionados. Pero España no es una isla y la situación de los demás también le afecta. Europa sí tiene que hacer un gran esfuerzo. Hacen falta muchas inversiones en autopistas, en ferrocarriles de mercancías, en puertos. Europa no se está esforzando lo suficiente y corremos el riesgo de tener estrangulamientos serios.

P. ¿Está usted preocupado con los precios del crudo? ¿Cómo le afectaría a una empresa como la suya y al sector un crudo a 80 o 100 dólares?

R. Les afectaría básicamente a nuestros clientes, a sus costes de transporte. No somos operadores de transporte, actividad que subcontratamos. Pero un crudo a 100 dólares tendría fuertes implicaciones en la cadena de suministro. Y en su eficacia, al menos en algunos sectores. Aun así, no me preocupa en exceso. Estos últimos años, para evitar el impacto dañino de los precios del crudo, se han hecho grandes progresos. Hemos logrado reducir el consumo de combustibles en las flotas. La utilización de vehículos es más eficiente. Hay menos camiones vacíos, mejor planificación de las rutas. Creo que estamos todos preparados para que un precio alto del crudo no nos pille desprevenidos.

P. Hablaba usted del proceso de deslocalización industrial a Asia. Desde su perspectiva, ¿cree que Europa va a perder la mayor parte de la industria que tiene actualmente?

R. No. No pienso que toda la industria se vaya a trasladar a Asia. No tiene sentido deslocalizar algunas industrias, entre otras razones, porque los costes salariales no son importantes; otras, porque los costes de transporte les afectan mucho. De todos modos, soy más optimista con respecto a España, que, creo, está en mejores condiciones de retener su tejido industrial que el resto de Europa.