"¡Que todo Madrid oiga a Dios!"

"Hay que sacudir la ciudad con métodos valientes. A Dios no se le puede escuchar tímidamente, ¡que toda la ciudad oiga a Dios!". Así proclamó ayer el predicador evangélico Luis Palau, plato fuerte del FestiMadrid, un macroconcierto que las Iglesias evangélicas organizaron el viernes y el sábado en la explanada de Las Ventas. Congregó, según los entusiastas organizadores, a más de 30.000 personas, la mayoría latinas, como Luz Marina, colombiana de 59 años, quien ayer era "plenamente feliz por estar en una fiesta de Dios". Aunque también había españoles llegados, algunos en autobuses de todo el país, desde Murcia hasta Lugo, como Ana, de 40 años, que proclamaba: "¡Creo en Dios y lo celebro!".

Artistas latinos desconocidos por el gran público español con nombres como Yuri, Assiria Nascimento (esposa del futbolista Pelé) o Jailen actuaron en el mismo escenario que Lole Montoya o José Luis Rodríguez, El Puma. Todos ellos, evangélicos declarados, cantaron gratis en un festival "espiritual".

"He cantado adorando. España necesita de Dios para combatir la violencia, los robos, necesita su fuerza moral", aseguraba la cantante gitana Lole Montoya -integrante del dúo Lole y Manuel-. También la popular artista Rocío Jurado apareció anoche por sorpresa en la fiesta para saludar a su amigo El Puma.

Desde su camerino, a pocos metros del gran escenario, el argentino Luis Palau, de 71 años aunque sin una arruga, seguía el festival en una pequeña televisión. "Queremos hacer famoso a Jesucristo entre los jóvenes", señaló con una enorme sonrisa y una mirada azul muy directa. Hablaba desde una caseta prefabricada, con aire acondicionado a tope y frutas sobre la mesa.

"Llevamos tiempo soñando con este festival, porque España es nuestra puerta espiritual a Europa", asegura Palau. Doctorado en Divinidad de manera honorífica por varias instituciones, como el Wheaton College, de Illinois, Palau comenzó a predicar con 17 años y ha escrito 44 libros. Ha recorrido el mundo con su mensaje y, según su portavoz, ha hablado en actos multitudinarios ante más de 22 millones de personas en 80 países. Hasta tiene una fundación llamada Asociación Evangélica Luis Palau, encargada de organizar las macrofiestas. Ha llenado estadios con su mensaje y líderes políticos de todo signo -desde Gorbachov a Ríos Montt- se han entrevistado con él.

En el año 2000, Palau decidió reforzar su estrategia comunicativa para llegar a un público más amplio y más joven y optó por organizar grandes festivales por todo el mundo. Los organizadores aseguran que en Buenos Aires llegaron a congregar hasta 400.000 personas.

El FestiMadrid, con el lema "¡Buenas noticias, buena música!", es la primera iniciativa conjunta de todas las Iglesias evangélicas de Madrid, más de 500, con más de 35.000 fieles, aunque en toda España son más de 700.000, según sus estadísticas.

El encuentro de Madrid, en el que Palau fue aclamado por la multitud como una estrella del rock, ha costado 600.000 euros procedentes de donativos, un tercio de ellos de España, y dos tercios de fundaciones y empresas de distintos países.

En la explanada de Las Ventas se escuchó durante dos noches "rock cristiano", ritmos caribeños y las jugosas letras de Yuri, una cantante mexicana que antes de convertirse fue portada de la revista Play Boy. Ayer confesó: "Estoy enamorada de Jesucristo".