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EL ENREDO
Columna
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Pene de ballena

HAY QUE TENER MALA SOMBRA para forrarse los taburetes del bar del yate con piel de pene de ballena. Publica EL PAÍS del martes 21 de junio: "El Christina Onassis, con sus cuatro terrazas, la habitación principal de 220 metros cuadrados y los taburetes del bar forrados de piel de pene de ballena". La madre que parió a san Pitopato. Pobre ballena. Ya me dirán qué necesidad hay de circuncidar ballenas para forrar taburetes de yate, pudiendo hacerlo con piel de pene de tigre, que te quedan unos taburetes a rayas preciosos. A la ballena, además, le agrias el carácter, porque en mar abierto eso debe escocer una barbaridad. Por un capricho. A saber qué se siente de especial al sentarse en un taburete forrado en piel de pene de ballena.

La próxima semana, el PP trae al Senado a un experto que dice que el hombre proviene del burro. Al parecer, él mismo es la prueba

Se estarán preguntando cómo llegaremos desde aquí hasta el comentario político. Eso está chupado, nunca mejor dicho. ¿No ven que estamos en España? Aquí estamos todo el día con el sexo en la boca, con perdón. Vivimos en el país más feliz de la galaxia. En lugar de debatir sobre sanidad, inmigración, educación o medio ambiente, debatimos sobre si la homosexualidad es pecado, vicio o virtud. Qué pesadilla, todas las semanas igual. Y prepárense: la semana que viene, el PP trae al Senado a un experto que dice que el hombre proviene del burro. Al parecer, él mismo es la prueba.

Hala, pasemos a comentar las elecciones gallegas y su prodigioso resultado. No sólo ha permitido ganar a todos los partidos gallegos. ¡Es que han ganado también todos los partidos españoles! Cada vez la política es más sofisticada. Antes se sabía quién ganaba, quién perdía, y adiós muy buenas. Desde hace un tiempo, ya es normal que ganen todos. ¡Pero es que, además, ahora se consolidan los que no se presentan! Esto ya es demasiado. Desde que preside el PP, Mariano Rajoy no hace más que perder elecciones y salir contento por la noche a decir que es un gran resultado. El día que gane tendrá que dimitir, por pura lógica.

Las fuerzas zetapenses, por su parte, se especializan en ganar sin ganar, y perder sin perder, sea en Cataluña, País Vasco o Galicia. ¿Ganan? No. ¿Pierden? No. Así es ZP: ni carne ni pescado, ni frío ni calor. Quien sí ha ganado en Galicia, indiscutiblemente, es Carod-Rovira. Él sí se ha consolidado como espantajo oficial del Reino. "¡Que viene Carod-Rovira!", gritan, y miles de personas votan lo que esté más lejos, para que no se rompa España. Y fíjense que España debe estar hecha de buen material, porque hace años que anuncian que se rompe y no hay manera. En realidad, desde que gobierna el maligno ZP hemos tenido tres elecciones: europeas, vascas y gallegas, y en todas ellas van perdiendo votos los nacionalistas. Aunque, por supuesto, todo el equilibrio político del país está pendiente de una saca de voto por correo que lleva nueve días viajando desde Argentina a Pontevedra. Nueve días. Será que viene en ballena. El martes abrirán la saca, y en el interior del último sobre con el voto definitivo, alguien habrá escrito: tonto el que lo lea.

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