El tranvía y los peatones se quedan con el centro
El Metrocentro eliminará el tráfico privado a lo largo de los 2,8 kilómetros de su recorrido por el casco histórico de Sevilla
El proyecto de diseño y construcción del metrocentro de Sevilla, el tranvía ligero impulsado por el Ayuntamiento para cruzar el casco histórico de la capital, prevé restringir el tráfico privado a los largo de todo su recorrido, de 2,8 kilómetros. La propuesta de la UTE Miguel Vidal Sánchez/Sener, adjudicataria del proyecto, plantea repavimentar todas las calles por las que circule el metrocentro para eliminar las aceras y las calzadas, construir plataformas compartidas para el tranvía, vehículos de emergencias y residentes y sacar los autobuses urbanos del casco histórico.
- Prado de San Sebastián. Los autobuses de Tussam que ahora llegan a la Plaza Nueva terminarán aquí su recorrido. El proyecto aún no está definido en este tramo de 425 metros, pero prevé una gran parada que funcione como intercambiador de transportes para connectar los autobuses con la línea 1 de metro y el metrocentro.
El tranvía cruzará la avenida de la Constitución por el centro de la calle
Los autobuses que llegan a la plaza Nueva terminarán su recorrido en el Prado
- Calle San Fernando. Toda la calle, de 24 metros de ancho, estará pavimentada al mismo nivel excepto la plataforma del tranvía, de una anchura de ocho metros, que se elevará cuatro centímetros sobre el resto. El tráfico privado queda restringido para los residentes, que contarán con un carril delimitado por un pavimento diferente y en el que se limitará la velocidad a 10 km/h. El resto de la calle (unos 13 metros), será peatonal. Los autobuses provenientes de Los Remedios (líneas 40, 41 y 42) terminarán su recorrido en la Puerta de Jerez, donde habrá un intercambiador para conectar con el metro y el metrocentro.
- Avenida de la Constitución: Puerta de Jerez-Archivo de Indias. La vía principal de acceso al casco histórico será peatonal. El tranvía circulará por una plataforma doble en el centro de la calle, compartida con los vehículos de emergencias y que se elevará cuatro centímetros sobre el resto. La parada del metrocentro estará en el entorno de Correos, "con marquesinas integradas en el entorno y que no corten la perspectiva diáfana de la avenida", según recoge el proyecto. El cruce con la calle Santo Tomás de Aquino se regulará con semáforos.
- Catedral-Banco de España. El diseño en este tramo de 400 metros está condicionado por su uso frecuente para eventos religiosos, como la Semana Santa. Para evitar tener que desmontar parte del sistema, se eliminarán las catenarias y el metrocentro se alimentará desde el suelo. Además, la plataforma del tranvía estará al mismo nivel que el resto. Habrá un cruce a nivel con la calle Alemanes regulado por semáforos.
- Plaza Nueva. Desaparecen la calzada y las aceras y todo se repavimentará al mismo nivel, menos la plaza. Habrá un carril reservado para el tráfico privado. El metrocentro circulará por una plataforma de vía doble y tendrá parada frente a la calle Barcelona.
- Méndez Núñez. Es uno de los tramos conflictivos al tratarse de una calle estrecha (seis metros de ancho) y que actualmente soporta un tráfico intenso. El proyecto prevé repavimentarla de forma que quede toda al mismo nivel. La mitad de la calle será peatonal y el resto estará ocupado por la plataforma del metrocentro, que en este tramo será de vía única y compartida con los vehículos de emergencias y de residentes.
- Plaza de la Magdalena. Sólo podrán acceder los vehículos de carga y descarga y los usuarios del actual aparcamiento de residentes y oficinas. El garaje del centro de El Corte Inglés cambiará su salida para evitar pasar por la plaza. Ésta se repavimentará entera al mismo nivel, incluido la plataforma del metrocentro, que aquí recupera la vía doble.
- Calle O'Donell. Otro tramo de especial dificultad por la estrechez de esta calle, de alrededor de 4,75 metros de ancho. También en este caso se dejará al mismo nivel el pavimento peatonal y la plataforma del tranvía, que se ubicará en el centro de la calle, será de nuevo de vía única y compartida con vehículos de emergencias y residentes.
- Velázquez. La vía del metrocentro ocupará lo que en la actualidad es la calzada de esta calle. El tranvía compartirá la plataforma con vehículos de emergencias y residentes. El resto de la calle (aproximadamente tres metros a cada lado del tranvía), será peatonal.
- La Campana-Encarnación. También aquí desaparecen los dos carriles de tráfico rodado, uno en cada sentido, con los que cuenta ahora la calle. Su lugar quedará ocupado por la plataforma doble del tranvía, compartida con emergencias, vecinos y taxis, que mantendrán la parada actual. La catenaria del entorno de la calle Sierpes será independiente al resto para poder desmontarla en Semana Santa.
- Encarnación-Plaza de San Pedro. Este entorno presentará una cara completamente distinta cuando esté acabado el proyecto Metropol Parasol, que prevé un museo arquológico subterráneo, un mercado de abastos y una plaza pública. El diseño del metrocentro asume ya esta nueva fisonomía y el tranvía circulará en una plataforma levantada cuatro centímetros respecto al resto del pavimento. La plaza actual es el destino final de varias líneas de autobuses urbanos, que ya no podrán acceder a esta zona y terminarán su viaje en el entorno de la Ronda María Auxiliadora, en el límite del casco histórico.
- Almirante Apodaca. También queda libre del tráfico privado. Todo el pavimento estará al mismo nivel y el tranvía circulara por el centro de la calle en una plataforma de un sólo carril. El resto será peatonal, aunque se mantienen los cruces con semáforos, en los que el metrocentro tendrá siempre prioridad de paso.
- Plaza Ponce de León. También desaparecerán la calzada y las aceras actuales y todo estará pavimentado al mismo nivel. Excepto la plataforma del tranvía, que se elevará cuatro centímetros. El tráfico privado tendrá un carril reservado junto a Escuelas Pías para canalizar el tráfico de salida de la zona, donde hay un aparcamiento subterráneo y dos hoteles.
- Ponce de León-Puñonrostro. El metrocentro se bifurcará en este tramo de algo más de 200 metros. El tranvía entrará al centro por por la calle Escuelas Pías, mientras que la vía de salida del casco histórico se ubicará en la calle Jáuregui, que también se repavimentará para dejar al mismo nivel la plataforma del metrocentro y la zona peatonal.
- Puñonrostro. Esta calle de 14 metros de ancho sólo está actualmente abierta al tráfico privado en sentido de entrada al centro. Hay un carril de salida exclusivo para transporte público. En esta calle estará la parada final del metrocentro, por lo que el proyecto plantea la construcción de un intercambiador de transportes junto a la Ronda María Auxiliadora para que los viajeros puedan conectar con los autobuses urbanos y la línea 3 del metro.
En marcha en 2007
La Consejería de Obras Públicas adjudicó a mediados del pasado mes de mayo el proyecto de construcción y diseño del metrocentro a la UTE Miguel Vidal Sánchez/Sener. La gestión del tranvía ligero ideado por el Ayuntamiento para solucionar el acceso al casco histórico correrá a cargo de la empresa municipal de autobuses (Tussam) en colaboración con Ferrocarriles Andaluces.
El proyecto se hará en dos fases. La primera, entre El Prado de San Sebastián y la Plaza Nueva, se licitará a finales de este año y el Ayuntamiento cuenta con que entre en funcionamiento en 2007, coincidiendo con la inauguración de la línea 1 de metro, con la que conecta el tranvía. La segunda fase todavía no tiene los plazos marcados.
La Junta y el Ayunramiento compartirán la financiación de la obra. El coste de todo el trazado, de 2,8 kilómetros, asciende a unos 60,5 millones de euros, de los que el Gobierno andaluz sufragará la parte correspondiente a la infraestructura (unos 40,9 millones) y la Administración local asumirá el material móvil (alrededor de 19,6 millones).
El proyecto prevé que el metrocentro recorra el casco histórico en poco más de 10 minutos. El tren tendrá una frecuencia de paso de cinco minutos en cada sentido y supondrá eliminar del centro los autobuses y el tráfico privado.
El alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, máximo impulsor de la idea, ha anunciado su intención de ampliar el recorrido en dos tramos más, uno hacia la Alameda de Hércules y otro hacia la estación de tren de Santa Justa. El proyecto contó desde el principio con el apoyo de los comerciantes del centro, que temían quedarse aislados si se peatonalizaba la avenida de la Constitución, la principal vía de acceso al casco. No obstante, este sector ha criticado algunos tramos del trazado definitivo y exige, sobre todo, que el tranvía no "sustituya" a la red completa de metro sino que la "complemente".
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