La decisión de la Audiencia sobre el etarra De Juana anticipa su futuro en prisión

La Audiencia Nacional confirmó ayer la prisión del etarra José Ignacio de Juana Chaos decretada por el juez Fernando Grande-Marlaska el pasado 10 de enero, por delitos de pertenencia a ETA y amenazas terroristas. Esta resolución no tiene efectos prácticos sobre el caso, pues el juez Santiago Pedraz decidió esta semana la puesta en libertad del etarra por esta causa, pero anticipa que van a prosperar los recursos interpuestos por el fiscal Jesús Alonso, que reclamó el procesamiento y prisión preventiva de De Juana por sendos artículos publicados en Gara el pasado mes de diciembre.

De Juana, uno de los más sanguinarios etarras, que fue jefe del comando Madrid, está condenado a más de 3.000 años de prisión por su participación en 25 asesinatos. El etarra, de 49 años, se encuentra en prisión desde enero de 1987, es decir, que ha cumplido 18 años de condena efectiva del máximo de 30 años previsto en la ley en aquel momento. El etarra se ha beneficiado de redenciones ordinarias y extraordinarias de penas, por lo que el cumplimiento definitivo de la condena, aprobada ya por la Audiencia Nacional, está fijado para el próximo 2 de agosto.

Sin embargo, De Juana escribió dos artículos que fueron publicados los días 1 y 30 de diciembre de 2004 en el diario Gara, próximo a la izquierda abertzale.

El primero de los artículos, titulado El escudo, constituía un duro alegato contra el sistema político, jurídico y penitenciario español, y fue interpretado como una rabieta porque el cómputo de su cumplimiento de condena no era exactamente como él había calculado y tenía que permanecer en prisión varios meses más. En el segundo, titulado Gallizo, en referencia a la directora general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, De Juana criticaba a los nuevos responsables de los centros penitenciarios, a los que, según el fiscal, señala como potenciales objetivos de ETA.

Prisión preventiva

Por ello, el fiscal solicitó primero su ingreso en prisión y luego su procesamiento por delitos de pertenencia a ETA y amenazas terroristas. Y el juez Grande-Marlaska ordenó el 10 de enero de este año la prisión preventiva de De Juana, que fue recurrida por su abogada Ainhoa Baglietto.

Mientras tanto, Grande-Marlaska dejó el Juzgado Central de Instrucción número 1 y fue sustituido por su nuevo titular, Santiago Pedraz. Este magistrado, el pasado 10 de junio, rechazó la petición del fiscal de procesar a De Juana por entender que no hay indicios de que pertenezca a ETA y de que haya cometido delito de amenazas terroristas.

Pedraz, además, ordenaba la puesta en libertad del etarra por esta causa y decretaba en el mismo auto la conclusión del sumario.

El fiscal ha presentado recurso contra esa decisión, que será resuelta en el futuro por los mismos magistrados que ayer confirmaron la prisión preventiva dictada el 10 de enero.

La mecánica de los recursos en la Audiencia ha provocado que la resolución dictada ayer por los jueces no tenga efectos prácticos, pues, aunque confirma la decisión adoptada por el juez en enero, una decisión posterior del juez Pedraz deja la resolución sin contenido.

Sin embargo, la postura adoptada ayer por los magistrados, que dan la razón al primero de los jueces, anticipa que en el futuro, cuando se pronuncien sobre el recurso presentado por el fiscal contra la libertad de De Juana, puedan actuar de la misma manera y ordenar la prisión del etarra.

Dos de los jueces, Antonio Díaz Delgado y Luis Martínez de Salinas, señalan que "el artículo titulado El escudo es un exordio a la pertenencia a la banda terrorista ETA, a los fines por ella buscados y a su actividad violenta y mortífera".

Nuevo delito

"Esa pública exaltación de su pertenencia al grupo terrorista", dice la resolución de la Audiencia, "una vez que el propio recurrente manifiesta haber cumplido las condenas impuestas por delitos terroristas, puede entenderse, en el estado en que se encuentra la causa, como indiciariamente constitutiva de un nuevo delito de pertenencia a banda armada".

El tribunal destaca también que el contenido de los artículos de De Juana "revela claramente una posible amenaza terrorista a determinadas personas, al señalarse (...) a determinadas autoridades y funcionarios de prisiones". Y agrega que "la simple inclusión de determinados nombres en los artículos que publica supone una seria amenaza que, desde luego, no pueden tomarse a la ligera".

El magistrado Ricardo Rodríguez formuló un voto particular concurrente en el que señalaba que la resolución no debía haber entrado en el fondo del asunto.

Aunque el contenido del auto hace suponer que De Juana volverá a prisión, para embrollar aún más el barullo procesal de recursos, fuentes jurídicas aseguraban ayer que será otra sección de la Audiencia, la primera, la que resolverá en primer lugar sobre la conclusión del sumario y podría ordenar a Pedraz que procese a De Juana. Eso, antes de que la Tercera se pronuncie sobre la libertad o prisión.