CC OO y el sindicato de funcionarios rechazan las jubilaciones anticipadas

El ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, anunció el lunes un plan de jubilaciones anticipadas para los funcionarios entre 58 y 64 años, que representan el 10% de la Administración central. Sin embargo, el secretario de Estado de Economía, David Vegara, dijo ayer que se trata de una mera idea en estudio, de una reflexión. La falta de concreción ha molestado a los sindicatos, sobre todo a CC OO y CSI-CSIF. Mientras, UGT se mostró más prudente y manifestó su malestar por enterarse de la propuesta a través de los medios de comunicación, pero expresó su disposición a estudiar y negociar su alcance.

El secretario general para la Administración Pública, Francisco Velázquez, anunció tras la reunión con los sindicatos la constitución de un grupo de trabajo compuesto por los representantes de los trabajadores y la Administración para negociar las condiciones de la jubilación parcial y del nuevo sistema de jubilación anticipada propuesto por el Gobierno. Por su parte, el responsable de servicios públicos de UGT, Julio Lacuerda, solicitó al Gobierno el traslado de la propuesta al ámbito del diálogo social y reconoció que "a partir de ahora no se podrá hablar por separado" del plan de rejuvenecimiento de los funcionarios públicos y de la equiparación de las condiciones laborales entre los trabajadores de empresas privadas y los empleados públicos.

Aplicación en 2007

Más críticos se mostraron los responsables de CC OO y CSI-CSIF. María José Alende, de CC OO, rechazó la medida por considerarla inviable desde el punto de vista económico y mostró su "discrepancia con el contenido y con las formas del plan". A juicio de Alende, la jubilación anticipada "sólo es viable si se recorta el gasto de la Administración pública", lo que supone la amortización de empleos.

Mientras, Jordi Sevilla se refería al plan en el Senado. El ministro puntualizó que las jubilaciones anticipadas no se podrán aplicar hasta 2007. Respecto a las manifestaciones realizadas por David Vegara, Sevilla negó que haya discrepancias en el seno del Gobierno. Este plan ha sido "largamente hablado" con el vicepresidente Pedro Solbes, dijo, informa Europa Press. "Estamos ante una propuesta que es imposible de valorar y cuantificar, porque no está concretada y no lo será hasta que se llegue al acuerdo", manifestó. Preguntado si había comunicado su propuesta al Ministerio de Trabajo con carácter previo, respondió: "Directamente, creo que no".

El proyecto de Sevilla recibió ayer las críticas del PP, que lo considera un "globo sonda frívolo". El portavoz del PP Julio Padilla criticó que Sevilla realizara el anuncio sin cuantificar el coste, ya que la medida podría tener un impacto negativo en las cuentas de la Seguridad Social. Mientras tanto, portavoces de CiU, PNV e IU expresaron sus cautelas ante el anuncio.