Los profesores de Granada secundan un paro masivo para protestar contra la violencia escolar

Los profesores de enseñanza primaria y secundaria de Granada secundaron ayer un paro masivo para protestar por el aumento de los casos de violencia escolar. Los sindicatos aseguraron que el paro fue seguido por el 95% de los 10.000 docentes de Granada, porcentaje que la Junta redujo a un 65%. Como complemento a la jornada de paro, más de 2.000 maestros y profesores participaron en una concentración convocada al mediodía por los sindicatos ante la Delegación de Educación en Granada, donde se leyó un manifiesto que aboga por abrir un debate sobre este problema.

El detonante del paro fue la agresión denunciada hace dos semanas por el director del Instituto Montevives, en Las Gabias, Luis Wulff, quien fue agredido por el padre de un alumno y retenido en su despacho durante 20 minutos. Desde entonces, según los sindicatos, se han producido nuevos casos de agresiones "verbales" de algunos padres al profesorado.

La jornada de paro, que se desarrolló sin incidentes, no fue apoyada por la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos al entender que "llega en un mal momento" por la proximidad de los exámenes finales, porque no fue comunicada con antelación y porque "se ha desarrollado sin agotar otras vías previas". No obstante, un portavoz de la FAPA, Fernando Veredas, reconoció que el problema de la violencia escolar es real y es necesario atacarlo con firmeza.

En virtud de los servicios mínimos, todos los centros públicos permanecieron abiertos. Como mínimo, un miembro del equipo directivo atendió a las pocas familias que acudieron con sus niños a los centros.

El secretario de Enseñanza de CC OO de Granada, Antonio Sierra, hizo hincapié en que la protesta no persigue "beneficios individuales ni aumentos retributivos", sino frenar la violencia escolar. Sierra destacó que el paro masivo es "la clara respuesta de que aquí nadie está magnificando ningún problema, sino que existía un verdadero cansancio ante el clima de inseguridad y violencia en las aulas que va creciendo poco a poco sin que nadie haga nada".

En la manifestación, una profesora de un colegio de la comarca de Guadix, que no quiso decir ni su nombre, relató a los periodistas que cada día "ocurre algo" en su centro. Contó que los protagonistas de estos actos son chicos y los que padecen la violencia suelen ser las mujeres.