La Costa del Sol contará en 2007 con 11 nuevos complejos residenciales para mayores de 55 años

La Costa del Sol va camino de convertirse en la California de Europa. En los próximos dos años está previsto que abran sus puertas once nuevos complejos residenciales para mayores de 55 años. Este producto turístico específico para mayores, consolidado desde hace años en el estado norteamericano que gobierna Arnold Schwarzenegger, atrae cada vez a más adeptos hacia el litoral malagueño. La mayoría de sus clientes son jubilados del norte de Europa, aunque el número de españoles que buscan un remanso de paz donde pasar su cuarta juventud va en aumento.

Alejados del ritmo frenético en el que transcurre la vida en primera línea de playa, y al amparo de la tranquilidad que se respira apenas unos kilómetros al interior, los clientes de estos complejos residenciales encuentran un espacio idóneo en el que gozar de una jubilación relajada y a la vez activa.

Según datos del Patronato de Turismo de la Costa del Sol, en 2007 habrán abierto sus puertas 11 nuevos complejos de este tipo. En Málaga capital se construyen dos urbanizaciones, una en la zona de Cerrado de Calderón (9.900 metros cuadrados) y otra en El Limonar (6.268), ambas con una inversión total en torno a los 10 millones. En Alhaurín de la Torre se ultima Sol Andalusí, urbanización que ocupará 150.000 metros cuadrados y en la que se invertirán 42 millones. En Mijas, Vitania Resort ofrecerá 324 viviendas a la venta y 62 apartamentos de alquiler en la primavera de 2007, tras una inversión cercana a los 150 millones de euros... Y así hasta superar la decena.

Esta filosofía de vejez activa al sol es la que siguen complejos como Sensara, en Benalmádena, una urbanización de lujo con calificación "sanitario-asistencial", y compuesta por 150 apartamentos, de uno y dos dormitorios, áticos y dúplex, distribuidos en siete edificios. En el proyecto se han invertido 30 millones de euros, y la creación de empleo prevista es de unos 300 puestos de trabajos. "El ocio es un punto clave en este tipo de centros", afirma Cristina López, directora de Comunicación de Sensara, "ya que facilita la socialización de los residentes". Este complejo está pensado para sacar el máximo provecho del clima tan privilegiado en el que está situado (en la zona hay entre 270 y 300 días de sol al año). Por eso, sus responsables han ideado 11.000 metros cuadrados de jardines llenos de árboles, fuentes y plazas interiores.

Esa clara vocación de ocio activo como modo esencial de vivir la madurez se nota muy especialmente en los servicios e instalaciones con los que cuenta: piscinas cubiertas y al aire libre, gimnasio, pista de tenis, zona de relajación con jacuzzi, sauna y baño turco, casa club con restaurante y un centro de negocios. Los clientes no tienen que preocuparse de cuestiones como limpiar la casa o llamar al fontanero, y las residencias cuentan con vigilantes y cámaras en las zonas comunes.

Serán nuevas urbanizaciones hechas a la medida de aquellas personas que comulguen con la idea del paso del tiempo de Woody Allen: "Acabo de cumplir los 60. Me queda toda una vida por delante".