Un millar de policías reforzarán la seguridad de las calles de Barcelona durante los meses de verano

El Cuerpo Nacional de Policía (CNP), los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona aportarán más de 1.000 efectivos para reforzar la seguridad en Barcelona durante los meses de verano. En el marco de la denominada Operación verano 2005, el CNP destinará 625 agentes en prácticas, 200 más procedentes de varias comisarías del resto de España y 110 investigadores especiales que actuarán en situaciones conflictivas. A esta vigilancia se añadirán, según fuentes del CNP, efectivos de la Guardia Urbana y 200 policías autonómicos.

Este incremento del número de agentes permitirá solventar la pérdida de efectivos que supondrán las bajas de personal que se producirán a causa de los traslados que habrá en julio. Según las previsiones oficiales, con el concurso de traslados se irán de Barcelona 322 agentes del CNP, a los que hay que sumar otras 54 bajas por jubilación (véase EL PAÍS del 27 de abril). De cualquier forma, los efectivos de refuerzo duplican este año los 500 policías que se destinaron para la Operación verano de 2004.

El plan tiene como objetivo combatir la particular operación turista de carteristas y tironeros. En resumen, pretende reducir los hurtos que sufren los viajeros y turistas. El delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, sostuvo ayer que el incremento de turistas extranjeros en la capital catalana no ha supuesto un aumento de la delincuencia. Aun así, hay zonas donde los robos son más frecuentes. El 66% de los delitos que se cometen contra turistas, señaló Rangel, se producen en el distrito de Ciutat Vella. Por ello, los barrios y las zonas de interés de este distrito están dentro de los 50 puntos que tendrán una presencia policial permanente.

Entre las zonas de especial vigilancia figuran el centro de la ciudad, las playas, puntos de interés turístico como la Sagrada Família, la plaza de Espanya y el parque Güell, y hasta 15 museos, entre ellos el Museo Picasso, la Fundación Tàpies y el del Fútbol Club Barcelona. El jefe superior de policía, José López, añadió que este año se vigilarán con especial énfasis la estación de Sants, el aeropuerto de El Prat y las fiestas mayores de la ciudad, en concreto la de Gràcia y la de Sants.

Las administraciones y representantes del sector turístico forman parte de la Mesa para la Seguridad del Turismo para ejecutar actuaciones conjuntas contra este tipo de delincuencia. La policía se reunirá durante el verano con el Gremio de Hostelería e instruirán a los guías turísticos para que indiquen a los viajeros cómo prevenir robos en los vehículos, rellenar impresos de denuncia y acudir a comisarías.