Carod y la política integradora

Barcelona

A Josep Lluís Carod Rovira le gusta repetir, en sus conferencias y mítines, que Esquerra Republicana es una formación "integradora, no excluyente, no discriminatoria", que pretende cobijar bajo sus siglas a ciudadanos procedentes de fuera de Cataluña, especialmente a los castellanohablantes.

En una conferencia pronunciada en el Colegio de Periodistas de Cataluña, en abril de 2003, el líder independentista defendió un nacionalismo y un "proyecto nacional" sobre todo respetuoso con los que, "sintiéndose catalanes, también quieren preservar su otra identidad". Para ello, subrayó la necesidad de "aumentar y diversificar el repetorio de símbolos comunes y hallar nuevos referentes nacionales". Por ejemplo, en cuestiones lingüísticas, Carod apostó por una política "transversal".

En la misma conferencia, el presidente de ERC advirtió de que sin la "participación" de los sectores "vinculados a la inmigración castellanohablante" no será posible "ningún proyecto realmente nacional" en Cataluña. Con este discurso, Carod inició una campaña para captar adeptos en 2001, previa al 23º congreso de su partido.

En marzo de 1997, se mostró dispuesto a apoyar "el ejercicio activo del uso del castellano por quienes tengan este idioma como lengua familiar".