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El Consistorio construirá una carretera para llegar a Valdemingómez sin atravesar la Cañada Real

La medida pretende evitar el riesgo de atropellos a los habitantes del asentamiento ilegal

F. Javier Barroso

El Ayuntamiento de Madrid, con su alcalde a la cabeza, Alberto Ruiz-Gallardón, está buscando medidas para aumentar la seguridad vial de las 40.000 personas que residen en la ciudad fantasma de la Cañada Real Galiana (Villa de Vallecas). El gobierno municipal, a propuesta de la Concejalía de Medio Ambiente, aprobó ayer un proyecto de obra para que los 4.500 camiones que cada día entran a los vertederos del sureste dispongan de una carretera específica paralela a la M-50 y no tengan que circular por la Cañada Real. Se pretende evitar así el riesgo de atropellos a los habitantes del asentamiento ilegal.

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Uno de los principales problemas a los que se enfrentan las 40.000 personas que residen de forma ilegal en la Cañada Real -situada en el kilómetro 14 de la autovía de Valencia (A-3)- es la inseguridad que les ocasiona el intenso tráfico de camiones. Las casas están construidas al borde de la carretera. Esto, unido a los numerosos niños que habitan en la zona, convierte la Cañada Real en un lugar peligroso.

Valdemingómez y el resto de vertederos del sureste registran una media diaria de llegada de 4.500 camiones que depositan allí residuos sólidos urbanos. Estas plantas trabajan día y noche.

Para acabar con esta peligrosidad, el Gobierno municipal aprobó ayer la construcción de una carretera, de un carril por sentido y 4,6 kilómetros de longitud, que arrancará en el cruce de la A-3 y la M-50 y llevará, en paralelo a la Cañada Real, pero sin entrar en ella, hasta los vertederos del sureste. "Evitaremos el paso de camiones en una zona tan peligrosa, tanto para los habitantes de la zona como para los conductores", señala Míriam Sánchez, directora de Valdemingómez. "Al margen del problema urbanístico que implica el asentamiento ilegal, que estamos intentando resolver con la Comunidad, hay un problema más urgente: el riesgo de atropello de sus habitantes. Por eso vamos a realizar esta obra", explicó ayer el alcalde tras anunciar el proyecto.

La obra costará unos nueve millones y un plazo de ejecución que Ruiz-Gallardón cifró en "unos 14 meses" desde la fecha de ejecución y que técnicos de Medio Ambiente rebajan a nueve meses. Antes estará expuesto al público durante un mes. A lo largo de los 4,6 kilómetros de carretera habrá pasos bajo la Cañada Real y rotondas de distribución. De este modo se garantiza la conexión entre las distintas partes de Valdemingómez: La Paloma, Las Dehesas y Las Lomas, además de la incineradora. "La circulación por la cañada siempre tiene que estar protegida al tratarse de una zona de paso protegida por ley", recuerda Sánchez.

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Ruiz-Gallardón precisó que la cañada no se cerrará al tráfico, y que seguirá siendo utilizada por quienes quieran acceder con sus vehículos a las casas o empresas ilegales del asentamiento.

El Ministerio de Fomento, como máximo responsable de la M-50 y de la autovía de Valencia (A-3), ha planteado algunos matices al proyecto inicial de Medio Ambiente. Entre ellos, que las conexiones con las dos carreteras citadas cumplan unos determinados criterios técnicos, como el radio de las curvas de incorporación o el ancho de la calzada. Mientras, la Comunidad está analizando el documento desde un punto de vista ambiental. Ella es la titular y responsable de la Cañada Real. El enlace será un nuevo vial de uso público, pero que sólo servirá para acceder a Valdemingómez. Esto supondrá "algunos pequeños cambios dentro de las instalaciones municipales", según Míriam Sánchez. Entre ellos están el cambio de ubicación de las básculas de entrada en la planta de tratamiento o alguna variación en el circuito que realizan los camiones. "Son unas obras muy baratas si se tiene en cuenta el beneficio que se puede sacar", añade Sánchez.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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