Aguirre y la ministra de Fomento se reunirán el 20 de mayo

La presidenta regional, Esperanza Aguirre, ha dado un paso al frente en su intento de recomponer sus relaciones con el Ministerio de Fomento. Ha llamado a la ministra, Magdalena Álvarez, para cerrar una reunión. Ésta, según el Ejecutivo autonómico, se celebrará en la Casa de Correos el próximo 20 de mayo.

La ministra había propuesto que en este encuentro estuviese también el ministro de Defensa, José Bono, como mediador, dadas sus buenas relaciones con la presidenta madrileña. Pero Aguirre ha rechazado la proposición, aunque acepta que Bono asista a otra reunión posterior.

Como excusa para la reunión entre Álvarez, Bono y Aguirre, el Gobierno central argumenta que Defensa es partícipe, mediante la cesión de los terrenos, de la Operación Campamento, el mayor desarrollo urbanístico de la región.

Fuentes del Gobierno regional explicaron ayer que no rechazan reunirse con ambos ministros, pero replican que la llamada efectuada hace unos días por la presidenta a la ministra era para "tratar temas de la Comunidad".

El 20 de mayo se reunirán Aguirre y su consejera de Transportes e Infraestructuras, María Dolores de Cospedal, con la ministra Álvarez y el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán. El asunto central a tratar: quién y cómo hacer la prolongación de la línea de metro a la nueva terminal del aeropuerto de Barajas.

Mayoría absoluta

Las relaciones entre Fomento y la Comunidad están muy dañadas por los diversos enfrentamientos que ambas administraciones mantienen por las infraestructuras de la región y los planes de vivienda de protección pública. El Gobierno regional sostiene que el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero está castigando a la Comunidad por haber dado la mayoría absoluta al PP en las últimas elecciones. El PSOE, por contra, desmiente estas afirmaciones y señala que las inversiones en la región por parte del Ministerio de Fomento son superiores en un 6% a las que concedía el Gobierno de José María Aznar, del PP.

El Ejecutivo de Aguirre se niega a financiar la ampliación de la línea 8 de metro hasta las nuevas terminales de Barajas, con el argumento de que se trata de una conexión interna del aeropuerto, por lo que debe ser Fomento quien la pague. De todas formas, Aguirre afirmó ayer que tiene previsto abordar en su reunión con Álvarez el problema de la conexión del aeropuerto que, según dijo, "corresponde a AENA, aunque si quiere que lo ejecute la Comunidad habrá que llegar a un acuerdo".La presidenta regional explicó ayer: "He hablado con la señora ministra y hemos quedado en vernos en la próxima semana". No obstante, más allá de si el metro llegará hasta la nueva T4, Aguirre recordó, según Europa Press, que el aeropuerto madrileño tiene una "especie de trenecito" [el denominado people-mover] que carece de conductor, pero que lleva a los pasajeros desde la T4 hasta lo que llaman el satélite [un enlace para vuelos internacionales], y que éste "era el tipo de transporte que estaba previsto en el proyecto original" entre las viejas y las nuevas terminales.

Aguirre expresó su intención de hablar con la ministra para saber "por qué ese tipo de transporte vale de la T4 al satélite, pero no vale de la T4 a las otras terminales". "Esto es algo que tenemos que discutir, en ningún caso se puede imponer nada", apostilló.

Finalmente, aseguró que el sistema de concesión [una empresa privada construye y explota la línea en cuestión] no es "rechazable" cuando no se trata de un "transporte social", como es la conexión interior del aeródromo, pues según señaló, "su coste puede ser afrontado por quienes están en tesitura de pagar billetes de avión que cuestan muchísimo más que el billete de metro de Madrid". "Esto no quiere decir que los que tienen el abono transporte no puedan utilizar el metro dentro de Barajas, que lo pueden hacer como lo han hecho a lo largo de todo este tiempo", concluyó.

Por su parte, el diputado socialista de la Asamblea de Madrid José Quintana criticó ayer la negativa del Gobierno regional a pagar la ampliación de la red de metro a Barajas, a la vez que dijo que esta actitud se explica porque Aguirre "actúa cegada por oponerse" al Ejecutivo presidido por José Luis Rodríguez Zapatero.

Situación sin rumbo

Quintana señaló que "los nervios de Aguirre, sus mentiras y sus rabiosos ataques al Gobierno de España están llevando a las políticas de transportes de Madrid a una patética situación sin rumbo".

Según el parlamentario regional socialista, el "espectáculo" dado anteayer por Aguirre y De Cospedal, cuando se reunieron con las asociaciones de líneas aéreas, fue "sencillamente bochornoso antes y después de la reunión". "No es digno de la Presidencia de la Comunidad de Madrid jugar con los usuarios y con los trabajadores del transporte público como Aguirre hace, con el único fin de realizar una oposición burda al Gobierno presidido por José Luis Rodríguez Zapatero", afirmó.

Quintana explicó que Aguirre "tuvo que decirse y desdecirse, y donde dijo digo, luego dijo Diego, con respecto a la construcción del metro hasta la terminal 4 de Barajas, una obra que tiene que ser financiada por la Comunidad de Madrid, tal como indican cada año los presupuestos de la región".

"Aguirre sabe que el metro a Barajas es su responsabilidad", destacó Quintana, que señaló que "no es menos grave la utilización que ayer [por el martes] hizo de las asociaciones de compañías aéreas al poner en su boca algo que era falso y que no ha sido convenientemente rectificado ante la opinión pública".

Quintana afirmó que tanto la Asociación Española de Compañías Aéreas (AECA) como la Asociación de Compañías Aéreas en España (ACA) "desmintieron haber solicitado a Aguirre que interceda ante Fomento para que lleve la línea 8 de Metro hasta la nueva terminal".

"Aguirre se ha instalado en la política del todo vale contra el Gobierno de España, aunque los perjudicados seamos los usuarios y los trabajadores, y debe recordar que el Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento de Madrid han mantenido reuniones a las que ella no ha querido asistir y en las que ha quedado claro que el metro a Barajas tiene que construirlo la Comunidad de Madrid", añadió.

El Gobierno de Aguirre mantiene que nunca ha rechazado la reunión con la ministra, pero que no consideraba apropiado que asistiese el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ya que éste carece de competencias en infraestructuras.

Quintana añadió que hasta Ruiz-Gallardón "tiene claro que el ministerio va a ejecutar aquellas actuaciones que son de su competencia y responsabilidad, como la conexión por tren entre la estación de Chamartín y el aeropuerto de Barajas, o la construcción de una carretera que sustituye a la M-111". "Aguirre parece estar cegada y cada día esta Comunidad esta más cerca del caos", reiteró Quintana.