La defensa del valenciano une a 150.000 personas en las 'trobades'

Alrededor de 150.000 personas, según los organizadores, convirtieron ayer las trobades que cada año organiza Escola Valenciana en un alegato más en favor de un mayor y mejor uso del valenciano, en las aulas, en la calle y en las instituciones. Los promotores de las trobades continuaron con la campaña de los cinco céntimos para denunciar la falta de apoyo de la Generalitat a la festa del valencià.

La Pobla de Vallbona celebró ayer su primera 'trobada' en 27 años de democracia

Miles de personas salieron ayer como cada año para reclamar más proyección social en todos los ámbitos, sobre todo el público. Benifaió, Montcada, Valencia, Castellón, La Pobla de Vallbona, Paiporta, Novelda o Campello fueron algunas de las localidades que eligieron la víspera del 25 d'abril para celebrar la festa del valencià al ritmo de dolçaina y a pesar de la falta de respaldo de la Generalitat.

En la ciudad de Valencia, un colorista cercavila arrancaba pasadas las diez y media de la mañana de la plaza del Ayuntamiento, con un buen número de políticos valencianos a la cabeza. Allí estuvieron los socialistas Joan Ignasi Pla, Isabel Escudero, Andrés Perelló, Ana Noguera, Juan Soto o José Ignacio Pastor, entre otros. No llegaron todos hasta el final porque la trobada coincidía con el mítin que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ofreció a mediodía en la otra punta de la ciudad. También apoyaron la cita con su presencia la coordinadora de EUPV, Glòria Marcos; el secretario general del Bloc, Enric Morera; o el responsable del sindicato STEPV, Vicent Mauri. Ningún político del PP participó ni en el cercavila ni en la fiesta, según los organizadores.

Pero los políticos iban detrás de una enorme pancarta, que portaban alumnos del colegio público Cervantes, que este año celebra su centenario, con el lema de este año: Compromís valencià, con la figura del mariscalet -mascota diseñada por Javier Mariscal para las trobades- como único adorno.

El amarillo de las decenas de globos y la música de las bandas pusieron el color a un día que parecía nublado. "El dilluns comença escola, el dimars tots a estudiar (...) i el dissabte a descansar per diumenge fer tots festa a la trobada en valencià", cantaban niños y mayores.

Josep Vicent Garcia, presidente de la coordinadora de Escoles en Valencià, recordaba mientras proseguía la marcha que desde hacía cuatro ediciones la trobada de Valencia, que antes se celebraba conjuntamente desde Silla y Sagunto hasta Llíria, se había reducido a l'Horta debido al aumento de los colegios participantes. "En la escuela, el valenciano no está consolidado, es imposible imaginar que recule o desaparezca", explicaba Garcia que, sin embargo, sí reconocía que su uso social era todavía limitado.

"El PP ha ralentizado mucho el valenciano, sólo marea con el nombre, pero hace poco por extenderlo", lamentaba Garcia sin rodeos. De los cerca de 24.000 euros que costó la celebración de ayer, la Generalitat apenas ha desembolsado unos 400 euros para subvencionar la confección del cartel. "Si eso es ayudar...", apostilló el presidente. Tampoco hay contactos con la Consejería de Educación, por eso en esta ocasión los promotores de las trobades organizaron la campaña de los cinco céntimos, que llevarán al propio presidente Francisco Camps para protestar por la falta de apoyo oficial.

Vicent Mauri, del STEPV, abundaba en esta idea: "Desde que gobierna el PP hay un retroceso importante en la enseñanza en valenciano, aunque luego se les llene la boca por defenderlo".

La denuncia no eclipsó la fiesta y en el paseo de la Alameda, donde la coordinadora de l'Horta celebró su fiesta, cientos de niños, padres y educadores charlaron, jugaron y comieron . Sólo en Valencia se esperaba el respaldo de 20.000 personas. Como la sombra escaseaba en el paseo, muchos de los participantes bajaron al cauce del río para refugiarse del calor.

Allí estaba Estrella, una joven ecuatoriana, con su hija de siete años enfundada en la camiseta de las trobades . "Bueno, hemos venido a apoyar el idioma y también porque a la niña le encantan los talleres, se divierte mucho", explicaba. A Joan, de Valencia, padre de un niño de infantil, le parecía especialmente vergonzoso que la Generalitat se permitiera el lujo de no respaldar un cita como la de ayer y no pasara nada. "Menos mal que el valenciano es lengua oficial, que si no....".

En Montcada, un río de gente transitó la avenida del Mediterráneo. Gigantes y cabezudos, castellers y, como en la práctica totalidad de las trobades, mucha música para celebrar que el año que viene este movimiento, con 20 años de historia a las espaldas, saldrá de nuevo a la calle en defensa del valenciano.

En la Pobla de Vallbona se esperaban unas 8.000 personas entre escolares de primaria y secundaria de la comarca de Camp de Túria, padres y profesorado. "La normalización sólo se ha proyectado en la enseñanza, pero no ha habido continuidad y complemento en otros ámbitos de la vida", destacaban los organizadores. Es la primera vez que tiene lugar en este municipio un acto de promoción y defensa del valenciano a lo largo de los 27 años de democracia, y que se produce tras la salida del PP de la alcaldía el pasado diciembre.