Calendario favorable

Los acontecimientos están situando a Andalucía en el centro del debate territorial. Frenado el plan Ibarretxe, tras los adversos resultados electorales cosechados por la coalición PNV-EA, sólo quedan Cataluña y nuestra comunidad en condiciones políticas suficientes como para poner en marcha el proceso de reforma estatutaria con cierta normalidad. Incluso, puestos a comparar, los catalanes lo tienen aún más difícil. Es notoria la preocupación existente en el PSC por la actitud de rechazo que encuentran en CiU, formación que no está por la labor de consolidar a aquéllos que la han desalojado de la Generalitat facilitando la aprobación de un nuevo Estatuto. Un paso histórico que, en caso de efectuarse, dejaría a los socialistas con el camino despejado para permanecer en el poder sin muchos sobresaltos. De ahí el insistente llamamiento de Pasqual Maragall a favor, prácticamente, de la unanimidad de todas las fuerzas políticas en pos de ese objetivo general de establecer un nuevo marco estatutario. De no conseguirlo, cosa más que probable, puede que se vea abocado a la convocatoria de unas elecciones anticipadas interrumpiéndose de forma brusca el calendario que se había establecido.

Nada de eso ocurre en Andalucía, en donde el escenario está lejos de las incertidumbres que se viven en otros lugares. Aquí los socialistas gozan de la mayoría suficiente y puede que cuenten con los apoyos requeridos para sacar adelante dicha reforma y, si hiciera falta, sin el PP. Los tres quintos del Parlamento que se marcan en el actual Estatuto pueden conseguirse sin el concurso de los populares y con IU y PA. Eso de los dos tercios que plantea el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con la vista puesta, más que todo, en el País Vasco, no deja de ser una recomendación que puede quedar en nada ante lo que recoge la norma andaluza. El plan de trabajo ya está en marcha y, para este jueves, el PSOE quiere hacer una presentación por todo lo alto de la propuesta de reforma del Estatuto que ha elaborado. Lo harán en Carmona, a donde acudirán representantes de todos los sectores sociales.

El método "trainera"

La trascendencia del evento es suma si se tiene en cuenta el contexto nacional en el que se produce. La estabilidad política que aquí se vive es un factor añadido de gran importancia. Da cierta ventaja a la hora de afrontar un desafío de esta envergadura, por lo que puede que, en esta ocasión, Andalucía se sitúe en una posición de privilegio. Tal vez, ni siquiera haga falta realizar ese extraño juego de las "traineras" que mencionaba semanas atrás el secretario de política institucional del PSOE, Alfonso Perales, al hacer referencia al método de trabajo y que pasaría por ir acometiendo el proceso de reformas de manera autónoma en Andalucía, pero mirando, al mismo tiempo, a lo que hacen los demás. Puede que las circunstancias hagan que los andaluces nos quedemos solos remando en la recta final, dejando atrás a País Vasco y Cataluña. Es algo más que una posibilidad, a tenor de los hechos que se están produciendo.

Mientras tanto, en Sevilla se va a poner a prueba la verdadera voluntad de algunos para que se aclare todo lo sucedido con lo de las facturas falsas tras acceder el alcalde, el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, a que la comisión investigadora sea abierta a los medios, que esté presidida por un miembro del equipo de gobierno y a comparecer, además, él mismo en dicho órgano. Y para aquellos que son muy dados a hablar de "prensa adicta" y "régimen mediático", es recomendable que no pierdan de vista estos días lo que suceda con las ruedas de prensa de la alcaldesa de Cádiz, Teofila Martínez, cada vez más descolocada con el asunto de la Zona Franca, o en La Línea, ciudad presidida por el también popular Juan Carlos Juárez, y donde se está dando una mafiosa persecución a determinados periodistas.