Detenidos dos 'aluniceros' que chocaron contra un coche camuflado de la policía

Los hermanos Emilio y Francisco Javier Lara García, de 38 y 32 años, respectivamente, han sido detenidos tras chocar el turismo que habían robado contra un vehículo camuflado de la policía. Al percatarse de que iban dos agentes dentro, hicieron un trompo e intentaron huir en dirección contraria. En el maletero llevaban el botín de dos alunizajes (empotrar un vehículo contra el escaparate de un comercio) a dos bares de la capital y de un atraco a mano armada.

Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana en la confluencia de las avenidas de Andalucía y de los Poblados (Usera), según informó ayer la Jefatura Superior de Policía de Madrid. Durante esos días, agentes del Grupo XIII de la Brigada de Policía Judicial, especializados en la lucha contra los robos, se encontraban precisamente en labores de patrullaje y vigilancia de este tipo delictivo, cuando le embistió un Opel Astra.

Los policías se encontraban detenidos en un semáforo en rojo, cuando el turismo les embistió. Los delicuentes se percataron rápidamente de que se trataba de un vehículo policial, por lo que efectuaron un trompo y trataron de huir en dirección contraria. Esto suponía un grave riesgo para los agentes y para la seguridad del tráfico.

'Viejos conocidos'

Los agentes del Grupo XIII que estaban en el coche camuflado eran "ya veteranos en persecuciones de aluniceros", según fuentes policiales, por lo que lograron abortar la peligrosa huida. Se trataba de dos viejos conocidos de la policía: Emilio Lara García, con 27 antecedentes, la mayoría por delitos contra la propiedad (robos en todas sus modalidades) y su hermano Francisco Javier, con 15 arrestos anteriores, en su mayoría por robos con fuerza y con violencia (atracos).

Los integrantes del Grupo XIII comprobaron la matrícula del Opel Astra y éste figuraba como sustraído en la madrugada del día anterior en la calle de Albox (distrito de Carabanchel). En el maletero, los agentes hallaron gran cantidad de monedas y dos cajones de cajas registradoras. Cuando llegaron a dependencias policiales, pudieron averiguar que esa misma noche habían sido asaltados dos bares por la modalidad del alunizaje. Uno se encontraba en la calle del Doctor Fleming (Chamartín) y otro en la calle de Narváez (Retiro).

Los investigadores hallaron un teléfono móvil que no pertenecía a ninguno de los detenidos. Gracias a la agenda, marcaron un número memorizado como "mamá". De esta forma descubrieron que pertenecía a una joven que había sido atracada por dos individuos que le robaron 30 euros y el teléfono celular. La víctima reconoció "sin género de dudas" a Francisco Javier Lara como el que la intimidó con un objeto punzante.