Los parques nacional y natural de Doñana tendrán un único director en 2006

La Consejería de Medio Ambiente dio ayer "el primer paso", en palabras de su titular, Fuensanta Coves, para unificar la gestión del parque natural y el parque nacional de Doñana, una vez que un reciente sentencia del Tribunal Constitucional confirma la competencia exclusiva de la comunidad autónoma en ambos espacios (hasta ahora, el Ministerio de Medio Ambiente gestiona los parques nacionales). El proceso abierto ayer concluirá antes de un año con el nombramiento de un único director-conservador para todo el espacio protegido.

Coves puntualizó que cada uno de los parques conservará sus órganos de gobierno y consulta; es decir, en el parque nacional se mantendrá el patronato y en el parque natural la junta rectora. "En el patronato, la representación de la Administración central y autonómica sigue siendo paritaria, mientras que en las juntas rectoras la presencia del Ministerio es minoritaria, lo que hace imposible su unificación", explicó.

Una de las consecuencias directas de la sentencia del Constitucional es que la presidencia de ese patronato (desempeñada ahora por la ministra de Medio Ambiente) pasará a ser designada por la Consejería de Medio Ambiente. "Creo que rebajar el perfil político de ese puesto mejorará la gestión", adelantó Coves.

Además de comprometerse a nombrar antes del 1 de enero (fecha para la que la Junta estima que recibirá las competencias plenas sobre el parque nacional) al director-conservador, la Consejería también quiere desarrollar para 2006 programas conjuntos de conservación, de uso público y de aprovechamiento de los recursos.

La Consejería ha aprovechado la puesta en marcha de este proceso de gestión unificada para ampliar el parque natural, que sumará 1.445 hectáreas (el espacio protegido conjunto supera ya las 108.000 hectáreas). Así, se incluyen 674 hectáreas en la zona del Acebuche (Almonte) por ser zona de campeo para el lince ibérico, 500 hectáreas en el entorno del Parador Nacional de Mazagón (incluida la franja costera donde llegó a proyectarse una urbanización), 215 hectáreas en Villamanrique de la Condesa (donde se ha detectado presencia del lince y el águila imperial) y 56 hectáreas en una zona de marismas de Aznalcázar.

Obras en Sierra Morena

Por otra parte, la Consejería de Medio Ambiente ha acelerado la construcción en Santa Elena (Jaén) de un centro de cría en semicautividad que actuará como complemento del centro de cría de El Acebuche, en Doñana, donde nacieron el pasado mes los tres primeros cachorros de lince ibérico en cautividad. El nuevo centro, que estará listo a final de año y donde se invertirán un millón de euros, contarán con 10 grandes jaulones de 2.500 metros cuadrados -el triple que las de El Acebuche-, cerrados por mallas de tres metros de altura.

El centro se construye en la finca de La Aliseda, en las estribaciones de Sierra Morena, donde se localiza uno de los principales núcleos de reproducción del lince ibérico, junto al parque nacional de Doñana. Medio Ambiente lo ha catalogado como centro en semicautividad porque con el diseño de jaulas se va a intentar que los linces tengan un espacio vital suficientemente grande como para que su comportamiento sea lo más natural posible, según destacó ayer durante una visita a las obras la delegada de Medio Ambiente en Jaén, Amparo Ramírez. La previsión inicial de la Consejería es empezar el programa de reproducción con siete linces, tres machos y cuatro hembras.