Pueblos con mucha pasión
Los municipios de la región representan el vía crucis con la colaboración de sus vecinos
Los días pletóricos de penitencia, procesiones y espiritualidad se refuerzan entre el Jueves y el Sábado santos con la celebración de numerosas pasiones vivientes en varios municipios madrileños. Este tipo de citas no sólo atraen a quienes viven a fondo las celebraciones religiosas, sino también a los curiosos y aficionados a los ceremoniales en directo.
- Morata de Tajuña. Este municipio ya se ha ganado el apodo del Jerusalén del sudeste de Madrid gracias a la representación de la Pasión cada Jueves Santo al atardecer (sobre las 20.00). Con un entusiasmo intacto a pesar de tantos años emulando a romanos, sacerdotes, apóstoles y judíos, los más de 40 miembros del grupo de teatro volverán a recrear algunos pasajes de la vida de Jesucristo ayudados por los vecinos del municipio.
- Valdilecha. La asociación cultural San Martín ha escogido más de una docena de escenarios al aire libre para que 150 vecinos de la localidad representen el Jueves Santo los últimos días de Cristo (a las 21.00). Un completo sistema de megafonía y luces asegura una espectacular puesta en escena que cada año presencian alrededor de 10.000 personas, o sea, cinco veces la población de Valdilecha. Los organizadores publicitan los detalles de la Pasión viviente a la vez que las lindezas del municipio en la web www.pasionvaldilecha.com.
- Villarejo de Salvanés. La representación de la Pasión de Jesús cumple 26 años y ha pasado de ser un acto religioso más a convertirse en una de las atracciones turísticas de la localidad. El Jueves Santo (a las 22.00), más de 140 vecinos se echarán a la calle ataviados con el vestuario de hace 2.000 años para deleitar al público que se concentre en la plaza de la Constitución.
- Chinchón. La escenificación de la Pasión y Muerte de Cristo es la más antigua de la región ya que se celebra desde 1964. Esta representación, que fue declarada de interés turístico en 1980, arranca el Sábado Santo (a las 20.30) en la plaza Mayor del municipio con la escena de la Última Cena. Después, los actores se desplazan a la plaza de San Roque, donde recuerdan La Oración y El Prendimiento, y recorren algunas calles del municipio para volver al punto de partida y escenificar La Resurrección. En total, son ocho escenas, cinco de las cuales se pueden observar desde la plaza Mayor.
- Aranjuez. La plaza de San Antonio será escenario, el Sábado Santo al anochecer, de la representación de la Pasión de Cristo por parte de 250 vecinos del municipio ribereño. Estas estampas religiosas comenzaron a representarse por primera vez en los años cuarenta. Después sufrieron una interrupción y hasta 1989 no se recuperó.
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