_
_
_
_

Detenido en Francia con explosivos el subjefe de los 'comandos' de ETA

Joseba Segurola proporcionó la furgoneta-bomba intervenida en 2004 en Cuenca

La detención ayer en Francia de Joseba Segurola Querejeta, presunto lugarteniente del jefe de los comandos de ETA, Garikoitz Aspiazu, Txeroki, no sólo frustra una cadena de inminentes atentados al ser requisada en la operación una mochila con explosivos, sino que la organización pierde a uno de los diseñadores de las campañas terroristas. Junto a él, fue arrestada una etarra con un perfil más bajo, Miren Itxaso Zaldua Iriberri, ex militante de Jarrai. La operación es fruto de una paciente investigación francesa apoyada por la Comisaría General de Información española.

Más información
Procesados en París tres presuntos etarras
Detenidos en Vizcaya dos presuntos colaboradores de ETA
Los dos etarras detenidos ayer en Francia tenían material para fabricar cuatro bombas

En Lannemezan, a 40 kilómetros de Tarbes (Altos Pirineos), una investigación policial puso punto final ayer al sanguinario currículo de Segurola, subjefe de los comandos etarras. Su detención no fue ni fruto de la casualidad, ni de los fructíferos papeles de Susper, sino de una laboriosa tarea de seguimientos y cruces de datos de la División Nacional Antiterrorista de la Policía Judicial francesa y la Comisaría General de Información. El arresto se produjo cuando los dos etarras se dirigían en sendos coches a un garaje que alquilaban en la localidad y que vigilaba la policía.

El dirigente etarra, de 29 años, armado con una pistola Sig Sauer B-226 de nueve milímetros con munición, fue sorprendido a bordo de un Citröen Picasso de color gris. Su compañera, de 33 años, armada con una pistola checa con munición, fue capturada a bordo de un Renault Clio. El coche de ella ocultaba un arsenal ambulante con destino a inminentes atentados: una mochila con varios tupperware que contenían explosivos, placas falsas de matrículas par+a colocar a los vehículos que fueran robados para cometer las acciones terroristas y herramientas para forzar los coches. Ambos portaban documentación falsa, los automóviles que conducían eran robados y llevaban matrículas falsas.

Segurola, natural de Azpeitia (Guipúzcoa), está huido de España desde 2001, cuando la policía desarticuló en Guipúzcoa el comando Aranba con el que presuntamente colaboraba desde un subgrupo denominado comando Haitza. El 19 de octubre de 2001 la policía registró su domicilio tras intentar detenerlo sin éxito.

La Comisaría General de Información considera que Segurola era ahora el lugarteniente de Txeroki, el jefe de los comandos de ETA, y desde tal puesto dirigía las células armadas de la banda. Segurola fue, precisamente, quien en febrero de 2004 proporcionó una furgoneta-bomba -la caravana de la muerte que el PP ha intentado sin éxito vincular con el 11-M- con 500 kilos de explosivos al comando Gaztelu, según fuentes policiales. La Guardia Civil la interceptó en un control en Cañaveras (Cuenca) cuando la transportaban a Madrid para hacerla estallar una semana antes de las elecciones del 14-M.

Segurola había escapado horas antes de la llegada de la policía al tener noticia del arresto de los miembros liberados (fichados por la policía y con sueldo) del comando Aranba que preparaban un atentado contra concejales de Eibar. El comando Haitza figuraba en una lista intervenida al dirigente de ETA Javier García Gaztelu, Txapote, detenido en Francia a principios de 2001. La célula etarra tenía en su poder seis kilos de explosivos y material para la confección de bombas. Segurola es relacionado en aquella etapa con la voladura de la discoteca Universal, en la localidad navarra de Lacunza, el 28 de septiembre de 2001.

Zaldua, donostiarra de 33 años, militó en la organización radical juvenil Jarrai y asistió al congreso de este grupo en 1992 en Bilbao, donde fue identificada por los agentes, pero no se le conocían vínculos con ETA.

Joseba Segurola Querejeta
Joseba Segurola Querejeta
Miren Itxaso Zaldua.
Miren Itxaso Zaldua.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_