El 'glamour' de la periferia

Se busca a La Juani. El director de cine Bigas Luna ha recalado en Sevilla, la penúltima estación de un largo peregrinaje que comenzó el pasado noviembre en Valencia, para encontrar a la protagonista de su próxima película. "La Juani es una chica de entorno humilde, vive en el extrarradio de una ciudad, y a fuerza de mucho trabajo ha sabido prosperar. Acepta el mundo al que pertenece, es una poligonera, pero al mismo tiempo quiere triunfar y salir de él. Ella es el glamour de la periferia", explicó ayer Bigas Luna, quien entre su filmografía cuenta con títulos como Las edades de Lulú (1990) o Jamón, jamón (1992).

En lugar de probarse un zapato de cristal, estas cenicientas del siglo XXI se colocaron una pegatina en la que aparece el rostro de una chica en blanco y cruzaron los dedos para resultar la elegida, para que fueran sus facciones las que llenaran el hueco. Al casting abierto que el equipo de la película ha realizado en Sevilla, el miércoles y ayer, se han presentado más de un centenar de jóvenes. Cuando termine el proceso de selección, al que le falta una segunda visita a Barcelona, habrán hecho la prueba más de 2.000 jóvenes de entre 18 y 23 años en Ávila, Valencia, Barcelona, Madrid y Sevilla. "Algunas son estudiantes de Arte Dramático, pero otras son simplemente eso juanis que sólo tienen que interpretarse a sí mismas", aclara Bigas Luna quien explicó ayer que ha montado "todo este tinglao" porque no existe una actriz profesional que se adecue al papel de su protagonista". "Tengo la teoría de que se nace actor, luego tienen que aprender muchas cosas, pero se nace", argulle el director quien fue premiado en el Festival de Venecia por La teta y la luna (1994).

El rodaje comenzará en septiembre y se realizará en Madrid, Miami, Los Ángeles y en la ciudad a la que pertenezca la chica seleccionada. Como la protagonista de la película, las jóvenes que esperaban ayer a la puerta de la discoteca sevillana en la que se realizó el casting están deseosas de triunfar. Cristina García, granadina de 18 años, está terminado Bachillerato y quiere estudiar Arte Dramático. "Si que me identifico con el personaje, porque es una chica del siglo XXI como yo. Me gusta ir de tiendas y divertirme con los ligues, que me tienen loca", asegura Cristina, poco antes de entrar a realizar la prueba en la que la directora de casting, Cónsul Tura, les pide que cuenten algo sobre sí mismas.

Adorne Ferreira tiene 23 años y ha venido desde Torremolinos (Málaga) sin que su novio se entere. "Soy dependienta de una tienda de ropa, pero he hecho un curso de baile y he participado en un espectáculo. Me presento porque este mundillo me gusta mucho y nunca había tenido una oportunidad, así que espero que sea esta", dice Edurne.

Manuela se pasa de la edad, tiene 26 años y es sevillana, pero no los aparenta. "Yo soy periodista, pero he hecho algunas cosas en interpretación y quería saber cómo era un casting. La verdad es que ahora no tengo trabajo de lo mío y ¿por qué no probar?", añade ilusionada.