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LA QUEJA

Carnet de pionero 3G

Ana Pantaleoni

Antonio apostó por la telefonía de tercera generación (3G) y pasó a formar parte del grupo de los primeros españoles con un móvil UMTS. Gracias al programa de puntos de Movistar Plus, compró un Sony Ericsson Z1010. En la caja, con el terminal, venía un carnet de pionero UMTS / 3G. Sin embargo, la experiencia no marcha a la velocidad que promete esta tecnología.

"El teléfono no funciona adecuadamente: en numerosas ocasiones no puedo realizar llamadas, se corta, recibo constantes avisos de llamadas perdidas, la batería se consume en un día sin apenas usar el teléfono (cuando el fabricante anuncia hasta 295 horas en espera) y a veces se calienta mucho", explica el cliente. "Todos estos problemas", según Antonio, "no están ocasionados por ningún fallo del terminal, pues éste funciona perfectamente, sino por la deficiencia en la cobertura UMTS".

El funcionamiento

El funcionamiento resumido por el cliente es el siguiente: a) zonas de buena cobertura UMTS: el Z1010 funciona en UMTS; b) zonas con deficiente cobertura UMTS: el Z1010 no funciona en UTMS ni GSM; c) zonas sin cobertura UMTS: el Z1010 funciona en GSM.

El portavoz del fabricante Sony Ericsson explica que el "Z1010 se comporta correctamente conforme al estándar UMTS / GSM definido. Por otra parte, es necesario constatar que el terminal móvil no es 'exclusivo' en modo UMTS, sino que es 'prioritario' en modo UMTS".

Telefónica Móviles de España ha enviado un correo a este suplemento con una explicación: "Como indica el lector, tanto en aquellos casos de buena cobertura UMTS como en aquellas áreas en que esta tecnología todavía no está presente, el funcionamiento del terminal es correcto bien sea en UMTS o en GSM. Los problemas detectados aparecen en los casos en que el nivel de señal y la cobertura UMTS todavía no es óptima, produciéndose, con determinados terminales, unos procesos de selección de red no optimizados que dan lugar a funcionamientos incorrectos".

Según la operadora, se han detectado problemas con primeras versiones del software en algunos terminales, los cuales han sido "motivados por un incorrecto funcionamiento del terminal que hace excesivas reselecciones entre las dos tecnologías radio (UMTS y GSM), dando lugar a que el terminal pueda quedarse bloqueado, sin posibilidad de recibir o realizar llamadas durante un determinado tiempo".

La operadora señala que "otro problema detectado en las primeras versiones de software de los Z 1010 es que éstos realizan las reselecciones radio entre células UMTS y GSM de una forma excesivamente lenta, motivando que, sin llegar a quedarse bloqueado, pueda perder llamadas entrantes si éstas coinciden en el tiempo, con esa fase de reselección en que el terminal no está operativo para responder, originando llamadas perdidas o interrupciones en las mismas".

Ante semejante situación, Antonio se ha molestado en buscar pionero en el diccionario: "Es la persona que abre camino en una actividad; no me disgusta serlo, pero no a este precio; además, mala publicidad estoy haciendo cuando compañeros, amigos y familiares tienen cobertura total con sus teléfonos GSM y yo no puedo ni llamar".

Telefónica Móviles España, consciente de estos problemas, explica que ha iniciado un proceso para la actualización del software o la sustitución de estos terminales con comportamientos defectuosos, "de forma que se garantice un adecuado nivel de calidad a los clientes, máxime si cabe en estos de servicios o tecnologías 'pioneras', cuyos clientes merecen para TME una atención especial por su voto de confianza por las nuevas tecnologías que, como es el caso del UMTS, suponen una decidida apuesta de futuro para esta compañía".

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Sobre la firma

Ana Pantaleoni
Redactora jefa de EL PAÍS en Barcelona y responsable de la edición en catalán del diario. Ha escrito sobre salud, gastronomía, moda y tecnología y trabajó durante una década en el suplemento tecnológico Ciberpaís. Licenciada en Humanidades, máster de EL PAÍS, PDD en la escuela de negocios Iese y profesora de periodismo en la Pompeu Fabra.

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