Un juzgado de Jaén anula el despido de una trabajadora que sufrió acoso sexual por parte de un superior

El Juzgado de los Social número 3 de Jaén ha declarado nulo el despido de una trabajadora por violación de sus derechos fundamentales, al considerar probado que la trabajadora sufrió acoso sexual por parte de su superior. Según recoge la sentencia, la demandante, E. P, fue objeto de "ofensas verbales y comportamientos no deseados" relacionados con el sexo que "han afectado a su dignidad y que también le han causado traumas psicológicos irreversibles". El escrito señala que el despido se produjo al no aceptar la víctima los requerimientos sexuales de su jefe, cuando ésta desempeñaba labores administrativas en una empresa dedicada al alquiler de viviendas en Linares (Jaén).

La sentencia, que ayer fue difundida por los servicios jurídicos del sindicato UGT, declara "la nulidad radical del despido por la violación de derechos fundamentales de la actora y señala asimismo la existencia durante la relación laboral de acoso sexual por parte el empresario".

El dictamen permite a la trabajadora la opción de elegir entre la reincorporación a su puesto de trabajo o el cobro de la indemnización correspondiente, fijada en 2.133 euros. En cualquier caso, la sentencia también condena al empresario a pagar una indemnización complementaria a la demandante de 3.000 euros por daños morales padecidos durante la relación laboral.

Durante el proceso, un testigo reconoció cómo el pasado 16 de agosto sorprendió al condenado acosando a la mujer, "intentando despojarle de la ropa y tocando con sus manos el pecho de la misma". Este episodio provocó a la mujer un estado de "terror y estupor", hasta el punto de que tuvo que ser trasladada al servicio de Urgencias, donde le diagnosticaron erosiones superficiales en tórax y abdomen.

Depresión

La sentencia también reconoce que la trabajadora padece actualmente un cuadro mixto ansioso depresivo de carácter reactivo y que le provoca un estado de "inseguridad generalizada con episodios de pánico asociados a un sentimiento de impotencia, que han sido provocados por la relación laboral a la que se ha visto sometida".

La demandante acudió en un primer momento al Centro Municipal de Información de la Mujer del Ayuntamiento de Linares para solicitar información sobre sus derechos. Desde allí la derivaron al Servicio andaluz de defensa legal para mujeres en caso de discriminación laboral, adscrito a la Secretaría de la Mujer de UGT.

En la actualidad, este servicio tiene abiertos 55 expedientes por casos de acoso sexual, tanto en la vía penal como laboral. En la provincia de Jaén es el segundo caso que se falla de forma favorable para las demandantes en los últimos tres meses.