Camps ha mantenido encuentros secretos con Maragall y Pujol

El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, se reunió en secreto con su homólogo catalán, el socialista Pasqual Maragall, el verano del año pasado y con su antecesor, Jordi Pujol, el pasado mes de enero. Fue el secretario general del PSPV-PSOE, Joan Ignasi Pla, quien hizo público ayer el encuentro de Camps y Pujol. "Podía explicar [Camps], ya que todos los días se le llena la boca contra Cataluña, por qué se reúnen a escondidas y de qué hablaron", inquirió.

Fue el propio Pla quien en una conferencia de prensa ofrecida ayer en Torrent recriminó al presidente Camps su doble moral, cuando por un lado se reúne a escondidas con dirigentes catalanes y a la vez acusa a los socialistas de "catalanistas" precisamente por entablar contactos con ese mismo gobierno. "Todos los días se les llena la boca contra Cataluña y contra los que tenemos algún contacto con ellos, pero antes podían explicar [el PP] por qué Camps se reúne con el ex presidente Pujol a escondidas", dijo Pla.

El dirigente socialista aludió ante los micrófonos y fuera de ellos a un encuentro celebrado el pasado 17 de enero entre el presidente Camps y Pujol -que visitó Valencia para ofrecer una conferencia- y del que el Consell no informó. Como tampoco dio publicidad a los contactos de su consejero de Relaciones Institucionales, Esteban González Pons, con el responsable de Presidencia del gobierno catalán, Ernest Maragall, el pasado mes de diciembre.

Mientras el PP y el Consell mantenían el secretismo sobre estas reuniones, simultáneamente han acusado a los socialistas de estar al servicio de los intereses catalanes y de ejercer como quintacolumnistas de una autonomía que se opone al trasvase del Ebro.

El portavoz del Consell, Esteban González Pons, no negó ayer la existencia de la entrevista mantenida entre Camps y Pujol hecha pública por el secretario general del PSPV. González Pons acusó al líder socialista de confundir "la privacidad con el secretismo" y explicó el encuentro del pasado mes de enero de la siguiente manera: "El presidente Camps recibió a Jordi Pujol como gesto hacia un ex presidente autonómico que visitaba nuestra ciudad para impartir una conferencia y no por ello se tiene que pensar en intereses ocultos que no existieron". Jordi Pujol aseguró ese mismo día, tras haberse entrevistado con Francisco Camps y antes de la conferencia que iba a pronunciar, que "el tema de la denominación conjunta" de la lengua lo estaban tratando ambos gobiernos. Pla aventuró que en esta reunión Camps garantizó a Pujol que el pacto cerrado por su predecesor Eduardo Zaplana en torno a la aceptación de la unidad lingüística del catalán, seguía siendo válido.

Fuentes de los gobiernos valenciano y catalán reconocieron que, con anterioridad, el verano pasado, Francisco Camps y Pasqual Maragall mantuvieron una primera reunión secreta ya siendo ambos presidentes de sus respectivas autonomías. Fuentes del propio Consell reconocieron que el encuentro tuvo lugar en la Comunidad Valenciana en una población limítrofe a Cataluña aunque no especificaron el contenido de la reunión. Hasta la fecha no ha sido posible, sin embargo, un encuentro oficial entre ambos presidentes, aunque sí han conversado por teléfono.

Fue el encuentro entre Pla y Maragall, previsto en principio para finales de febrero y aplazado luego a mañana para hablar de la creación de una eurorregión mediterránea que se extienda de Cataluña a Almería, el que reactivó el interés de la Generalitat valenciana por retomar los contactos con Cataluña. De hecho, Camps invitó a Maragall a una cumbre sobre el Arco Mediterráneo que debía celebrarse en Murcia el mismo día que los dos socialistas tenían previsto verse en el municipio castellonense de Morella. En este encuentro, convocado por Camps y su homólogo murciano Ramón Luis Valcárcel, también se invitó al balear Jaume Matas y al andaluz Manuel Chaves.

Poco después de que Pla diera prácticamente por aplazada su reunión con Maragall por la moción de censura que el PP ha presentado contra el gobierno catalán, un portavoz del Consell dejaba también en suspenso hasta Semana Santa el encuentro en Murcia. Chaves ya excusó su asistencia alegando que la invitación a la cumbre con tan poca antelación le impedía acudir y Maragall alegó que tampoco podía porque se reunía con Pla.