Condena a Auna por quitarle clientes de forma desleal a Telefónica
El fallo ordena que se devuelvan los abonados captados con fraude
Una sentencia de la Audiencia de Barcelona declara probado que Auna cometió competencia desleal al conseguir que algunos clientes de Telefónica contrataran sus servicios mediante engaño o sin su consentimiento expreso. El fallo, que revoca una sentencia anterior, indica que esta preasignación fraudulenta no sólo atañe al Código Civil, sino a la competencia, y condena a Auna a cesar con estas prácticas y a devolver los abonados captados irregularmente. Auna siempre ha señalado que se trata de casos aislados.
Nuevo varapalo judicial a la preasignación, el mecanismo legal por el que cualquier abonado de Telefónica puede encaminar sus llamadas telefónicas por otra operadora, sin marcar prefijo, sin necesidad de cambiar de línea y conservando su número telefónico.
La Audiencia Provincial de Barcelona, en una sentencia del pasado 9 de febrero, ha estimado el recurso de Telefónica de España considerando que las preasignaciones irregulares realizadas por Auna no atañen sólo al Código Civil, sino que infringen la Ley de de Competencia Desleal, puesto que a través de "esas prácticas se intenta obtener posiciones de provecho en el mercado con la infracción de normas".
La sentencia anula así otra anterior del Juzgado de Primera Instancia número 35 de Barcelona, que había declarado probadas los prácticas irregulares "en un número reducido de operaciones" llevadas a cabo por Auna, pero había desestimado la petición de Telefónica de que se condenara a su rival por prácticas desleales a la competencia.
El fallo de la Audiencia Provincial estima en su integridad la apelación de Telefónica y, declarando desleal las conductas referidas, condena a Auna "a cesar de inmediato y en el futuro de toda práctica de preasignación idéntica o similar a las descritas", y "a la remoción de las conductas llevadas a cabo". Asimismo, se condena a Auna a publicar la sentencia en dos periódicos de tirada nacional.
Actualmente, más de 2,4 millones de abonados de Telefónica se han preasignado con otra compañía. Pero no siempre los consumidores loa hacen voluntariamente. Para conseguir un cliente, algunos agentes comerciales, que casi nunca pertenecen a la operadora, sino a empresas externas, utilizan métodos como la falsificación de la firma. Un poco más estilizada es la consecución de la firma mediante engaño: bien en documentos en los que sólo se solicita el envío de información o alegando que es para justificar ante los superiores la visita a un domicilio.Una vez conseguida la preasignación, el cliente se entera de que está abonado a otra compañía cuando le llega la primera factura y sufre un verdadero calvario para darse de baja.
A estas preasignaciones fraudulentas, en las que se cambia de operador sin la autorización explícita por parte del usuario, se le denomina slamming, y, según las organizaciones de consumidores, han motivado ya más de 165.000 denuncias.
Además, Telefónica de España, como principal afectada, ha presentado más de un centenar de denuncias contra Uni2 y Auna, y ha remitido a la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) aproximadamente 270 reclamaciones, y dos archivos con otras numerosas reclamaciones.
En su defensa, Auna ha señalado en numerosas ocasiones que los casos de preasignación fraudulenta son muy aislados y todos ellos han sido solventados de común acuerdo con el cliente. Además, dada su apuesta por el acceso directo a través del cable, cada vez son menos los clientes de esta operadora que eligen la preasignación. No obstante, otras compañías, como Tele2, Uni2 o Jazztel, siguen apostando por el acceso indirecto.
A partir de agosto, entró en vigor una nueva modalidad, la preasignación verbal, por el que ni siquiera se precisa el consentimiento por escrito del abonado. Basta una simple llamada, verificada por una empresa independiente, para preasignar al abonado. Telefónica ha recurrido por vía administrativa esta normativa, pero el recurso ha sido desestimado. Por ello, ha elevado la demanda a la Audiencia Nacional y se ha pedido suspensión cautelar de este procedimiento. Además recomienda a sus clientes que llamen al 1004 en caso de preasignación fraudulenta.
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