Malas sensaciones tras el debate

Del debate en el Parlament sobre el hundimiento del túnel de la línea 5 del metro sólo se pueden sacar conclusiones negativas. En primer lugar, ¿por qué se anunció el cese de dos personas, a pesar de que el mismo consejero Joaquim Nadal dijo que eran inocentes? Y si eran inocentes, ¿por qué les hace dimitir? Da la sensación de que los destituye por no tener que dimitir él. En segundo lugar, ¿por qué se hacen acusaciones tan fuertes sin aportar pruebas? La imputación del presidente Maragall de que CiU recibía comisiones del 3% de las obras públicas es más propia de algunas tertulias de radios de Madrid o de programas nocturnos de televisiones que de un Parlamento de un país democrático. Y en tercer lugar, y lo más triste de todo, ¿por qué del debate no han salido las causas del accidente ni las soluciones de los pobres vecinos del Carmel que continúan sin poder volver a casa.