El Gobierno premiará a los perceptores de la renta activa de inserción que acepten un puesto de trabajo

El Gobierno ha introducido cambios en la renta activa de inserción (350 euros mensuales que perciben los colectivos con dificultades de acceso al mercado laboral) para fomentar que los desempleados perceptores de esa prestación acepten un empleo. Los beneficiarios que interrumpan el cobro para comenzar a trabajar recibirán un 25% de la renta (94 euros mensuales) durante el periodo de trabajo sin que esta cantidad cuente como consumo de la renta.

Es la principal novedad del programa de renta activa de inserción para 2005 que aprobará hoy el Consejo de Ministros. El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, considera esta medida clave para incrementar el porcentaje de aceptación de un empleo, que se ha demostrado muy bajo.

Hasta ahora, era el empresario quien recibía el incentivo para contratar a un perceptor de renta activa, pues el trabajador seguía cobrándola y el empresario abonaba la diferencia con el sueldo ordinario. El secretario general de Empleo, Valeriano Gómez, cree necesario "desplazar" ese incentivo al empleado para incrementar la efectividad de la renta. De los 56.422 perceptores contabilizados en 2004, no más de 1.000, según asegura Gómez a este periódico, aceptaron un empleo. Los perceptores de esta renta son en su mayoría mayores de 45 años, víctimas de la violencia machista, minusválidos y trabajadores eventuales agrarios. Este año, además, el periodo máximo para percibir la renta se amplía un mes (de 10 a 11) y se reduce de tres meses a uno el plazo de espera para cobrarla. Se calcula que la recibirán 71.000 personas, para lo que se cuenta con un presupuesto de 300 millones de euros.

En el caso de las mujeres maltratadas, se les concederá una ayuda adicional de 1.125 euros para facilitar el cambio de la residencia. También se les procurará una orientación profesional individualizada y se les dará prioridad en las ofertas de empleo.