El Ayuntamiento quiere revitalizar Azca con actos culturales

Organización de actos culturales y publicidad. Esto es lo que el Ayuntamiento ofrece a los comercios cercanos al Windsor para compensar las pérdidas que han sufrido desde el incendio del edificio. La Comunidad se comprometió a estudiar caso por caso las necesidades de cada negocio. El presidente de la asociación que los representa, Víctor Sandoval, se mostró "satisfecho con la primera toma de contacto" con las administraciones.

El Ayuntamiento, por la mañana, y la Comunidad de Madrid, por la tarde, decidieron ayer, 10 días después del incendio, reunirse con la asociación de pequeños y medianos empresarios, profesionales y autónomos perjudicados por el siniestro en la torre Windsor.

El Ayuntamiento se comprometió a poner en marcha un plan de revitalización de la zona similar al que se utiliza en otros ejes comerciales. El consejero delegado de Economía y Participación Ciudadana, Miguel Ángel Villanueva, concretó tras la reunión algunas medidas: harán publicidad para mentalizar a los madrileños de que la normalidad ha vuelto a Azca; actividades de captación, como ofertas o bonos, e incluso organizarán espectáculos culturales que atraigan a los compradores. "Se hará una campaña que apelará a la solidaridad de los ciudadanos", indicó.

El responsable de Economía admitió, sin dar cifras, que estas medidas supondrán un coste económico "que será asumido por el Ayuntamiento", y reveló que la recién creada asociación podrá recibir las mismas subvenciones que otras agrupaciones comerciales.

La Comunidad de Madrid, por su parte, ofreció a los afectados la puesta en marcha desde mañana mismo de una mesa de trabajo en la que se analice, caso por caso, las necesidades de cada comercio. Fuentes de la Comunidad no precisaron si en la reunión se había hablado de la concesión de ayudas económicas.

El presidente de la asociación, Víctor Sandoval, se mostró "satisfecho con esta primera toma de contacto". En primer lugar, por la participación en ambas reuniones de los máximos dirigentes del sector en la región y, en segundo lugar, porque el consejero de Economía, Fernando Merry del Val, se comprometió a "actuar con rapidez, porque hay muchos comercios que con esta situación no podrán durar mucho tiempo", explicó Sandoval.

Respecto a que la reunión se celebrara 10 días después del incendio, lo que provocó que en los primeros momentos los comerciantes se sintieran desatendidos por las autoridades, Sandoval se mostró comprensivo: "Entendemos que lo prioritario era la seguridad. Pasado el primer susto, enseguida se pusieron en contacto con nosotros para ofrecernos su ayuda", señaló. Pero también advirtió: "Hay un compromiso verbal de que nos van a ayudar. En las próximas reuniones ya pediremos medidas más concretas".

Los asesores legales de la asociación han avisado a los comerciantes de que el juicio para fijar las indemnizaciones que puedan corresponderles "puede tardar en torno a ocho años, hasta que el juez determine quién es el responsable del incendio". Mientras tanto, sólo dos negocios de los 75 asociados podrán recibir compensaciones por parte de sus aseguradoras. "Los demás no, porque no hemos sufrido daños materiales", dijo Sandoval.

Tiendas cerradas

Aun así, son varios los comercios que todavía no pueden abrir porque se encuentran dentro del perímetro de seguridad. Cuatro de ellos podrán hacerlo a lo largo de la semana cuando instalen las medidas de protección. Pero los dos que están debajo de la torre "difícilmente podrán abrir", admitió el consejero delegado de Economía en el Ayuntamiento.

La asociación calcula que las pérdidas alcanzan los 1.200.000 euros cada semana y que peligran 400 de los 1.000 puestos de trabajo que tienen los casi 200 comercios afectados. De momento, sólo agrupa a 75 de ellos, pero en breve espera representarlos a todos. "La situación puede empeorar todavía más, cuando ya no lleguen los miles de curiosos que se acercan cada día para hacer fotos al edificio calcinado", se lamentó Sandoval.