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LA SEGURIDAD EN LOS GRANDES EDIFICIOS

La policía interroga a un familiar de los dueños del almacén quemado en Huelva

La Subdelegación del Gobierno de Huelva informó ayer de la detención y posterior puesta en libertad de Rafael Ll., familiar de los propietarios del edificio de almacenes Llanes, que fue destruido la madrugada del jueves por un incendio. El detenido fue reconocido por algunos testigos como la persona que habría sido vista en el lugar de los hechos "portando una garrafa".

Además, los técnicos del Ayuntamiento de Huelva culminaron alrededor de las 14.00 el derrumbe del edificio, si bien dejaron sin tocar una zona para que la policía científica estudie las causas del siniestro. Fuentes municipales explicaron que durante el fin de semana se culminaría la limpieza del solar, salvo los dos metros cuadrados que serán objeto de estudio para determinar las causas del incendio. El Cuerpo Nacional de Policía había reclamado al Ayuntamiento de Huelva que paralizase el derribo del edificio siniestrado hasta que se llevase a cabo la inspección, o bien se dejase en pie la estructura suficiente como para poder inspeccionarlo y aclarar las causas del siniestro.

Por otra parte, dos bomberos que participaban en la extinción de un incendio declarado en el palacio de Los Gálvez, en Málaga, sufrieron heridas de carácter leve. El edificio, un gran caserón de estilo barroco del siglo XVIII situado frente a la catedral, ardió ayer por causas no precisadas. La extinción fue complicada al afectar a vigas de madera. Los bomberos heridos sufrieron contusiones, uno en la rodilla al hundirse parte del suelo y otro al golpearse una mano con un mazo. La vivienda estaba desocupada en el momento del siniestro.

Otras siete personas tuvieron que ser atendidas ayer por equipos sanitarios al resultar intoxicadas por el humo causado por un incendio originado alrededor de las 11.15 en otra vivienda de Málaga, cerca de la Cruz de Humilladero. En otro fuego registrado en la ciudad malagueña sufrió heridas de primero y segundo grado una mujer de 68 años, al comenzar a arder el colchón de la cama donde dormía con su cónyuge, que resultó ileso.

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