El empate fuerza otro pleno para la ley de Suelo
El voto de la diputada foralista Enriqueta Benito a favor de la ley de Suelo produjo ayer un empate a 37 entre los partidos del Gobierno (PNV,EA y EB) y la oposición (PP, PSE y SA), lo que obliga a celebrar un nuevo pleno para repetir la votación. Se celebrará ésta el lunes y, de persistir el empate, el proyecto decaerá.
Antes de las dos votaciones reglamentarias en situación de empate, Benito (UA) manifestó que el proyecto "no es lo suficientemente malo" como para votar en su contra. Dirigiéndose al consejero, Javier Madrazo (EB), Benito le dijo que su ley "no es para echar cohetes ni tan progresista como él presume", sino "normalita" y "no demasiado distinta a las que ya existen", algo que consideró positivo. Pero "tampoco es cuestión de entrar en un sector como el de los promotores y constructores como un elefante en una cacharrería", criticó por otro lado.La situación recordó a la del debate presupuestario del pasado 28 de diciembre, en el que el apoyo de la representante de UA posibilitó la victoria del Gobierno gracias al fallo que impidió emitir su voto a una parlamentaria socialista. Todo el mundo contenía ayer el aliento en cada una de las numerosas votaciones que se registraron y reprodujeron el empate a 37. Quedaron rechazadas primero las enmiendas a la totalidad y parciales del PP y SA. El Grupo Socialista ya había retirado las suyas en comisión en protesta por la forma de tramitarse la ley, protesta que ayer volvió a explicitar su portavoz, Jesús Loza. Del mismo modo, el popular Anton Damborenea volvió a criticar la falta de informes preceptivos que debían acompañar al proyecto y no se han emitido ni presentado.
Lo previsible de la actuación de Benito, dada la disposicion favorable a la ley que mostró ya en el debate en comisión, obligó a todos los grupos, primero a asegurar la asistencia de todos sus miembros y después, a mantenerse alerta y evitar toda distracción o equivocación en el manejo del sistema de voto. Ayer funcionó sin incidentes. Asistió incluso de la parlamentaria popular Arantxa Quiroga sólo seis días después de haber dado a luz a su tercer hijo.
Tanto la Mesa del Parlamento como la Junta de Portavoces se reúnen esta mañana para convocar el pleno del lunes, apenas 24 horas antes de que el lehendakari disuelva la Cámara. El pleno comenzará a las 10.30 y será breve, ya que entrará directamente en votación, pues los turnos de defensa y oposición a la ley se agotaron ayer. El debate fue una repetición de los argumentos ya esgrimidos por los grupos desde la aprobación del proyecto, durante el breve trabajo en la ponencia y en su discusión en la comisión.
El consejero, Javier Madrazo, defendió que la ley es "imprescindible" y centró sus críticas en el PSE por "obstruccionista", y en SA, grupo al que censuró por haber buscado sólo "protagonismo" con su oferta de negociación a última hora. A los socialistas, con quienes Madrazo ha intentado un acuerdo hasta el final, les reprochó que han tenido la "misma actitud inmovilista" que con el plan Ibarretxe. "Ha quedado de manifiesto que a Batasuna y PSE no les preocupa que miles de personas demanden una ley de Suelo para pasar de las 5.000 a las 10.000 viviendas de protección oficial al año", se quejó.
