Azkarraga abre la segunda oficina del 'Inem vasco'

El Servicio Vasco de Empleo-Lanbide abrió ayer su segunda oficina en Euskadi. El consejero de Empleo, Joseba Azkarraga, de EA, inauguró el centro en Basauri frente a una manifestación de trabajadores del Inem que exigían al Gobierno que asuma las políticas activas de empleo en lugar de duplicar servicios.

La nueva oficina de Lanbide dará cobertura a toda la comarca de Nervión e Ibarzabal, así como a la zona de Llodio, lo que supone más de 120.000 personas, con una tasa de paro conjunta del 8,7%, un punto y medio más alta que la media vasca. El consejero destacó que en los últimos cuatro años la tasa de paro en esta zona se ha reducido en 1,2 puntos. Lo más reseñable es la bajada en casi cinco puntos del paro femenino, que ha pasado del 18,3% en 2001 al 13,2% del año pasado.

En el centro trabajarán cinco personas: un jefe de oficina, una administrativa y tres trabajadores dedicados a labores de orientación. El Inem vasco se puso en marcha en mayo pasado con la apertura de una primera oficina en Salvatierra, a la que ha seguido la de Basauri. La tercera está prevista en Irún.

Una vez completada esta primera fase, se realizará una evaluación de los resultados obtenidos, que precederá al despliegue paulatino y definitivo de las 27 oficinas restantes hasta completar la treintena incluidas en el proyecto estratégico del Plan de Empleo 2003-2006.

Un centenar de delegados de UGT, CC OO, CSIF y USO participaron ayer en la concentración ante la nueva oficina de Lanbide. UGT aseguró en un comunicado que el Gobierno está despilfarrando los recursos públicos al seguir creando oficinas en lugar de culminar el proceso de transferencias del Inem, ya que, en cualquier caso, el Servicio Vasco de Empleo no podrá ejercer como una "ventanilla única". Los parados que cobran una prestación por desempleo van a seguir obligados a estar inscritos en las actuales oficinas del Inem mientras el Ejecutivo autónomo no acepte las transferencias. Euskadi se niega asumir las políticas activas si no van acompañadas de la gestión de las cuotas de la Seguridad Social de los trabajadores que las sostienen.

UGT-Euskadi aboga porque el Ejecutivo autónomo coordine los organismos de empleo ya existentes, asumiendo las políticas activas del Inem, que es el principal agente y la entidad que más recursos destina, como la propia consejería reconoció ayer, en lugar de gastar dinero en apoyar la proliferación de organismos que sólo "distraen" a los parados.

En todo caso, Azkarraga expresó su voluntad de coordinarse con el resto de las administraciones.