"Vamos a España a buscar más inversión"

El presidente de México, Vicente Fox, de 62 años y padre de cuatro hijos, todos adoptados, viaja el lunes a España, donde inaugurará junto a los Reyes la Feria Arco. Su victoria electoral en las elecciones del 2 de julio de 2000 levantó una gran expectación entre los mexicanos. Por primera vez un candidato de la oposición (Partido Acción Nacional) llegaba a la presidencia y ponía fin a más de setenta años del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el poder. Cuando se han cumplido dos tercios del sexenio, las críticas arrecian contra su gestión. Los medios de comunicación no dan tregua y tratan de descalificar al gobernante del cambio y la prometida transición. Fox hace caso omiso a los ataques y recorre el país junto a su esposa, Marta Sahagún, y recita los logros de su mandato: 4,2% de crecimiento, 320.000 nuevos empleos, equilibrio fiscal, aumento de la inversión extranjera.

"México sigue su línea, siempre opuesto a las intervenciones unilaterales y junto a la ONU. Nos alegra que se hayan celebrado elecciones en Irak"

"Se dice que el narcotráfico ha rebasado el poder del Estado. Es falso. Estamos dando batalla y seguiremos. Tenemos el control de la situación"

Pregunta. ¿Qué echa usted en falta en la relación bilateral entre México y España?

Respuesta. Me parece que las relaciones están en un grado superior. Pero nunca hay que estar satisfecho, siempre puede irse a más, y esto es lo que estamos haciendo. Trabajamos con el Gobierno del presidente Rodríguez Zapatero, con los inversores, los empresarios. No hay que olvidar que España es el gran inversor en América Latina, y lo es en México. Vamos a mostrar la fortaleza de la economía mexicana, y a trabajar por más inversión, más comercio y también más intercambios culturales y educativos. Tenemos un acuerdo de libre comercio con la UE que nos facilita las cosas. Voy a Madrid con una delegación muy potente de los grandes empresarios mexicanos, y otros que presiden cámaras o asociaciones.

P. ¿Qué resultados concretos espera de esta visita a España?

R. Tendré conversaciones prácticamente con todos los presidentes de las grandes empresas. Por ejemplo, el de Caja Madrid acaba de anunciar la asociación con la mutua Mi Casita en México, con el propósito de inyectar muchos recursos y meterse de lleno en el sector de construcción, infraestructura, crédito hipotecario... Hablamos de muchos otros frentes en los que hay oportunidades de inversión. Pronto habrá nuevas licitaciones en la generación de energía eléctrica.

P. ¿Qué significado tiene que México sea este año el país invitado en Arco?

R. Es una muestra de los fuertes lazos que tenemos los dos países en el ámbito de la cultura. Para México es un orgullo estar presente en Arco y promover lo que es nuestro país. Vamos a hablar de diversos temas con los Reyes de España, con el presidente Zapatero abordaremos la reforma de la ONU, cuestión en la que ya estamos trabajando juntos y ya está próxima la fecha para presentar nuestra propuesta.

P. ¿En qué posición se sitúa hoy México en el debate sobre multilateralismo y la reforma de la ONU, después de la guerra de Irak?

R. México sigue su línea de fondo, siempre por la paz, la armonía entre las naciones, y siempre en la línea del multilateralismo, siempre opuesto a las intervenciones unilaterales, y siempre, siempre, junto a Naciones Unidas. En este sentido, nuestra posición no ha variado y nos da un enorme gusto que se hayan realizado en Irak las primeras elecciones democráticas, con sus contratiempos.

P. ¿Le preocupa que el presidente Bush mantenga una actitud intransigente, con nuevas amenazas a países como Irán y Siria?

R. Me parece que Estados Unidos será el primer interesado en que las cosas avancen en la línea que he señalado, es decir, en la línea de democratizar y transferir al nuevo Gobierno de Irak la autoridad y la soberanía.

P. En la reciente presentación de su último libro, el juez Baltasar Garzón, asiduo visitante de su país, ha dicho que en México hay mucha lucha partidista y poco Estado, y le reprocha a usted falta de liderazgo.

R. Desconozco esas declaraciones, las respeto porque el juez Garzón es muy libre de decir lo que se le ocurra. Pero puedo afirmar que México goza de instituciones muy fuertes en sus poderes de la Unión, en el sistema financiero y bancario, en el poder judicial, en la educación y así en todos los terrenos. El añadido que trajimos al Estado mexicano y al país el 2 de julio de 2000 es el de la democracia. Quizá el juez Garzón está añorando viejos tiempos de presidencialismo y autoritarismo que ya terminaron y no volverán jamás. Ahora en México tenemos una presidencia democrática, que opera y actúa a través de participación ciudadana, de consensos y acuerdos democráticos con las distintas fuerzas políticas.

P. El crimen organizado vinculado al narcotráfico ha desencadenado en lo que va de año una violenta ofensiva dentro y fuera de las cárceles que parece imparable...

R. Se dice que el narcotráfico ha rebasado el poder del Estado. Es falso. El poder del Estado mexicano no será rebasado nunca, ni ahora ni después por el narcotráfico. Tenemos problemas, como muchos otros países. Estamos dando una batalla frontal y seguiremos dándola. Tenemos el control de la situación. Si los capos y los carteles del crimen organizado han reaccionado de esta manera violenta frente al Estado mexicano, se encontrarán con una respuesta contundente. No permitiremos ese tipo de retos. No permitiremos más desorden dentro de las cárceles. Hemos puesto en orden los penales federales y no permitiremos que se relaje la disciplina estricta.

P. Pero da la sensación de que algunos poderes del Estado muestran una gran ineficacia frente al crimen organizado.

R. ¿A qué se refiere?

P. Por ejemplo, en Ciudad Juárez, donde más de 300 mujeres han sido asesinadas y poco se ha averiguado sobre estos crímenes.

R. Son más de 300 homicidios cometidos en 12 años, no en un año ni en seis meses. No se hizo la justicia debida en esos años, la justicia local no operó, ni tampoco las fuerzas de seguridad locales, ni la procuraduría local. Por lo tanto, el Gobierno federal asumió la responsabilidad y creó dos fiscalías especiales, y hemos obtenido resultados importantes. El número de homicidios de mujeres ha bajado de manera drástica; hemos avanzado y están resueltos más de la mitad de estos homicidios y los culpables están en la cárcel. No todos los casos han quedado impunes. En tercer lugar, todos los procesos en los que hubo dolo o mala actuación de parte de jueces, procuradores y fiscales ya están denunciados. Hay más de 80 de estos casos. Puedo afirmar que el delito en general en la plaza de Ciudad Juárez se ha reducido en más del 30% desde que están allí las fuerzas federales. Y ahí seguiremos hasta que Ciudad Juárez entre en la normalidad.

P. Después del reciente incidente diplomático con Estados Unidos a propósito de la lucha antidroga, ¿vislumbra un endurecimiento en las relaciones a causa de la llegada de Condoleezza Rice a la Secretaría de Estado?

R. Se llegó a un punto en el que hubo un conflicto potencial. Hubo unas declaraciones irresponsables por parte de funcionarios estadounidenses que no correspondían a la realidad. Actuamos con firmeza y se han hecho las correcciones debidas, ha habido nuevas declaraciones del embajador y de otros funcionarios y la situación ha quedado clara. Quiero subrayar que la relación México-EE UU es tan fuerte que conflictos como Irak o el reciente incidente diplomático no alteran el componente básico de la relación.

P. Sin embargo, EE UU apoya al ex presidente salvadoreño Francisco Flores para la Secretaría General de la OEA, y no al candidato mexicano, el canciller Luis Ernesto Derbez. ¿Sintió este gesto de la Administración Bush como una bofetada?

R. Hay que esperar. De momento están las candidaturas en marcha. Lo que puedo decir es que la OEA requiere de un nuevo dinamismo, activarse en muchos frentes y ése es el plan que tiene Derbez. Con él a la cabeza tendremos una OEA independiente.

P. A 17 meses de las presidenciales se habla más de la campaña que de muchos problemas de México.

R. No sorprende que ya estemos metidos en un proceso electoral. Hoy México es un país democrático, los procesos electorales, las candidaturas, se resuelven abiertamente y frente a la opinión pública. Es parte importante del cambio que ha habido en el país.

P. Las encuestas apuntan una recuperación del PRI. ¿Una victoria de este partido sería para usted un fracaso político personal?

R. No sé quién ganará las elecciones. Mi obligación es entregarle buenas cuentas a los mexicanos, que mi Gobierno tenga una sólida imagen y un buen porcentaje de aprobación de la población. Según las últimas encuestas, mi Gobierno y mi presidencia tienen una aprobación de entre el 65% y el 70%. Además, el pueblo tiene claro hacia dónde tiene que seguir el rumbo del país: con una economía de libre mercado con fuerte responsabilidad social, tiene que seguir trabajando para reducir más la pobreza, para generar empleo y formar capital humano, y para que prevalezca el Estado de derecho. La ley por encima de todo dentro de una democracia. El rumbo está claro, los mexicanos decidirán quién es el mejor en julio de 2006.

El presidente de México, Vicente Fox, empieza el martes una visita a España, donde inaugurará junto a los Reyes la Feria Internacional de Arte Contemporáneo (Arco), de la que el país latinoamericano es el invitado de honor. Fox también tiene previsto reunirse con todos los presidentes de las grandes empresas españolas y trae consigo a una potente delegación de empresarios mexicanos. Viene a buscar más inversión, comercio y más intercambio cultural y educativo.