Cuevas, Fidalgo y Méndez tratan de desbloquear el diálogo social

Los líderes de los sindicatos UGT y Comisiones Obreras y de la patronal CEOE compartieron anoche mesa para intentar reconducir el proceso de diálogo social que quedó enturbiado por las divergencias respecto al salario mínimo. Cándido Méndez, José María Fidalgo y José María Cuevas intentaron aproximar posiciones para lograr un acuerdo sobre los criterios de negociación colectiva para 2005.

Los agentes sociales se dieron anoche una oportunidad para reconducir el diálogo social. Las cúpulas de la patronal CEOE y de los sindicatos CC OO y UGT celebraron una cena en Madrid para intentar avanzar en uno de los asuntos más urgentes del diálogo social, el acuerdo de negociación colectiva. Además de los secretarios generales de los dos sindicatos y del presidente de CEOE asistieron los responsables de acción sindical (Toni Ferrer, de UGT, e Ignacio Fernández Toxo, de CC OO) y el secretario general de la patronal, Juan Jiménez Aguilar.

Durante tres años seguidos, empresarios y trabajadores han suscrito este acuerdo, que sirve de guía para los convenios colectivos con directrices para la moderación salarial y el fomento del empleo. Las divergencias surgidas desde final de año -entre otras razones, por las discrepancias sobre la reforma del salario mínimo- hicieron encallar este debate. El acuerdo debería haberse firmado este mes.

Pese a la urgencia por lograr un consenso, las conversaciones están en una fase muy inicial. Fuentes de la negociación aseguran que las partes no llevaban propuestas maduras a la reunión de anoche. El propio José María Cuevas explicó horas antes del encuentro que en él se hablaría "de todo". Cuevas vinculó el acuerdo sobre negociación colectiva al avance sobre el salario mínimo.

En unas jornadas sobre la Constitución Europea organizadas por la Asociación para el Progreso de la Dirección, Cuevas subrayó que lo ocurrido con el salario mínimo "ha paralizado" el diálogo social. El líder de la patronal aludía al acuerdo aprobado en el último Consejo de Ministros del año que fijaba una revalorización automática del salario mínimo a partir de 2008 para protegerlo de las subidas de la inflación. Los empresarios y el propio ministro de Economía, Pedro Solbes, expresaron su rechazo a esa medida.

Cuevas aseguró ayer que es necesario buscar "una fórmula que satisfaga a todos", consistente en mantener el poder adquisitivo de esa renta pero sin revisión automática. El presidente de la CEOE pidió a los sindicatos que sean sensibles a esta cuestión. Sobre negociación colectiva, aseguró que es necesario modernizar algunos convenios.

Pedro Solbes, que también intervino en las jornadas, destacó la importancia de la negociación salarial y se mostró confiado en que las partes logren una "formulación común" sobre el salario mínimo. En una línea diferente, el secretario general de Empleo, Valeriano Gómez, subrayó que el Gobierno ya decidió modificar el Estatuto de los Trabajadores para asegurar el mantenimiento del poder adquisitivo del salario mínimo, aunque sería positivo que la reforma contase "con el mayor consenso posible". Gómez invitó a las partes a suscribir el acuerdo del Consejo de Ministros.