Fraga afirma que se puede suspender la autonomía vasca para frenar el plan

Manuel Fraga considera que, ante el desarrollo del plan Ibarretxe, "puede llegar a ser imposible seguir ignorando la posibilidad de suspender la autonomía" vasca. No es la primera vez que el presidente gallego propone aplicar el artículo 155 de la Constitución, pero ayer recurrió al pasado para justificar la normalidad de esa medida: "Lerroux [jefe de Gobierno de la II República], que no era un autoritario, sino un radical veterano, la suprimió en Cataluña en 1934. Y no pasó nada".

Fraga hizo estas declaraciones en su comparecencia posterior al Consejo de la Xunta, en el cual se había aprobado una declaración institucional en la que, "en su condición de nacionalidad histórica constitucionalmente reconocida", hace un llamamiento "a todos los gallegos, a sus representantes políticos y a las instituciones para que, lejos de caer en la tentación de emular maximalismos soberanistas, mantengan su apoyo al marco constitucional y estatutario".

Fraga calificó el proyecto de nuevo estatuto aprobado por el Parlamento vasco como "el mayor desafío a la Constitución en sus 26 años de historia"; pero, con todo, no se mostró tan preocupado por las consecuencias del plan, como por la reacción del Ejecutivo. "En este momento no veo peligro para la unidad de España. El peligro está en la debilidad con la que el Gobierno está tratando este asunto", señaló el presidente gallego, que añadió que Zapatero "está afrontando el plan de forma desconcertante, debido a la debilidad de su no existente mayoría, [...] lo que demuestra que tenemos un Gobierno por accidente".

Una cuestión opinable

El presidente de la Xunta consideró que la admisión a trámite del plan en el Congreso es una cuestión opinable, "pero dadas las características de la propuesta, podría ser innecesario, porque es incompatible no ya con la Constitución, sino con la realidad de España". Fraga expresó su total acuerdo con los discursos del Rey y del ministro de Defensa, José Bono, en los actos de la Pascua Militar, y también con la idea planteada por el presidente de Navarra, Miguel Sanz, de convocar una conferencia de presidentes para tratar la cuestión, "porque el plan Ibarretxe intenta hablar de algo que llaman Euskal Herria que afecta a más territorios que el País Vasco".

La declaración institucional aprobada por la Xunta considera que el proyecto del lehendakari además de suponer "una amenaza" contra el régimen constitucional "al ser un proyecto incompatible con su fundamento esencial, consagrado en su artículo segundo: la indisoluble unidad de España", constituye un riesgo "para el fundamento político y jurídico del ejercicio al derecho a la autonomía por el pueblo gallego". La declaración señala que el plan afecta también a los derechos de los miles de gallegos residentes en el País Vasco, "al situarlos ante la disyuntiva de tener que renunciar a su propia nacionalidad como miembros de una única entidad política".

Por otra parte, el ex presidente del PP en el País Vasco y actual europarlamentario Carlos Iturgáiz anunció que su partido denunciará la próxima semana ante las instituciones europeas "el pacto del PNV con ETA para conseguir sacar adelante el plan". Iturgáiz pidió al presidente del Gobierno que "deje su talante y muestre firmeza democrática" con el lehendakari en su reunión del jueves.