El Ayuntamiento prohíbe el tabaco sin poner salas de fumadores

El Ayuntamiento de Madrid recobró ayer su actividad tras el largo fin de semana que dio paso al nuevo año con una novedad: desde ayer no se puede fumar en las dependencias municipales. La decisión, que fue adoptada por el equipo municipal de Alberto Ruiz-Gallardón hace varias semanas, entró en vigor sin que se habilitaran salas específicas para que los fumadores pudieran ejercer su derecho a disfrutar de un pitillo.

La normativa municipal que prohíbe fumar en las dependencias comunes de los edificios municipales contempla que se establecerán zonas específicas para poderlo hacer, pero ayer no se habían indicado dónde se encontraban estos espacios. Fuentes del consistorio explicaron que los carteles de metacrilato encargados al efecto no habían llegado a tiempo. Ocasión que aprovecharon los más estrictos para mostrarse enérgicos con los fumadores que intentaron encender un cigarro.

Manuel Cobo, el vicealcalde, es de quien depende que esta medida funcione. Cobo curiosamente ha dejado de fumar hace unas semanas y ayer no se encontraba en el Ayuntamiento, donde sí estaba el alcalde, que no fuma. Pedro Calvo, el concejal de Seguridad, sí fuma, como el consejero delegado de Economía, Miguel Ángel Villanueva, que ayer no estuvo en su despacho. Ana Botella, concejal de Servicios Sociales, y Alicia Morena, de las Artes, también fuman, mientras que sus compañeras Paz González, de Medio Ambiente, y Pilar Martínez, no lo hacen. Tampoco fuma el concejal de Hacienda, Juan Bravo.

Despacho

Así las cosas, en cada sede municipal se fueron estableciendo normas sobre la marcha y se habilitaron despachos para que los fumadores pudieran echarse un pitillo. Cuando el consenso no se alcanzó, no hubo más remedio que salir a la calle.

Inés Sabanés, la portavoz de Izquierda Unida, intenta dejar de fumar desde hace tiempo, pero no lo consigue. "Lo que hemos hecho en el grupo ha sido dejar un despacho para fumar, y si alguien comparte despacho con alguna persona que no fuma no lo ha hecho", explicó. "Pero no he visto ninguna identificación del Ayuntamiento sobre salas de humo. Tampoco he visto carteles en los que se recordara la prohibición. Lo que sí nos han mandado a los grupos es una normativa al respecto y consejos para dejar de fumar".

La entrada en vigor de la prohibición de fumar le pilló a la portavoz socialista, Trinidad Jiménez, en una playa del Caribe, de donde regresará hoy. "Yo no fumo", explicó. "En mi grupo casi ninguno lo hacemos. Isabel Villalonga sí es fumadora, pero cuando tenemos reuniones y le pedimos que apague el pitillo, lo hace. He hablado con el grupo y me han dicho que, aunque entraba en vigor la prohibición de fumar, el Ayuntamiento no estaba preparado para que quienes fuman pudieran hacerlo. Supongo que es cuestión de tiempo el que todos nos acostumbremos".