"Todos tenemos un poquitito de jetas"

Pregunta. Dice que en esta segunda temporada de la serie Casi perfectos se desmelena. Pero si suele hacer personajes como del Opus...

Respuesta. Más que desmelenarnos, hemos intentado hacer una mirada más gamberra a la familia. En mi caso, hacer un personaje un pelín más jeta, más egoísta y más mentiroso.

P. No se estará usted abriendo la gabardina.

R. Todos tenemos un poquitito de mentirosos y de jetas, y que tire la piedra el que esté libre de pecado.

P. ¿Se siente identificado con la imagen de chico piadoso y aseado?

R. Ésa es la imagen que reciben a través del personaje que tú haces. Pero para nada.

P. ¿Convierte en oro todo lo que toca?

R. No, para nada. Son etiquetas.

P. Porque usted no está acostumbrado a suspender en ningún examen.

R. Sí, sí. He suspendido, sí. Y además yo creo que es bueno suspender, porque la próxima vez te preparas más y mejor.

P. ¿Qué le hace pensar que Casi perfectos desbancará a El comisario? ¿Se cree que la policía es tonta?

R. La policía no es nada tonta, y menos Tito, que es amigo, Y como en Casi perfectos tenemos nuestro aquél, vamos a convivir perfectamente. Ya no están los tiempos para decir: "Yo quiero un cuarenta y pico por ciento", como Médico de familia.

P. ¿Qué es la audiencia?

R. Aquello que en televisión nos sirve para medir un éxito o un fracaso. Pero a ese medidor le falta la parte cualitativa.

P. ¿Si el público pide basura hay que dársela, como lo de las diez mil moscas?

R. El término basura es muy subjetivo, y quizá se haya desenfocado un poco. Hay hueco para todo el mundo.

P. ¿Y las tómbolas, los tomates y las granjas?

R. Yo creo que todo el mundo tiene derecho a expresarse. Otra cosa es, a lo mejor, cuáles son los días o los horarios.

P. ¿Es mejor ser payaso o ser músico?

R. Cada momento tiene su cosa. Pero mi formación es musical, y, si tengo que elegir, le diré siempre que músico.

P. ¿Milikito se ha hecho mayor?

R. Milikito es un personaje que se quedó en una época maravillosa. De él aprendí muchísimo, y tengo unos recuerdos increíbles.

P. Presentador, actor, músico, compositor. ¿Vale para todo?

R. No, para nada. Si soy algo es una gotita.

P. ¿Malaya?

R. [Ríe] Mi madre lo decía. "Tú eres como tu signo, un cabezota". Soy aries.

P. No creerá que los niños van a pedir a los Reyes su disco El soldadito de plomo en vez de la bicicleta.

R. Pues espero que pidan las dos cosas, y que los padres sean suficientemente inteligentes como para darles diez discos y la bicicleta.

P. ¿A los éxitos de Globomedia se han añadido bendiciones con el PSOE, al tener en puestos clave personas relacionadas con su productora?

R. No. Ni antes... Sólo somos una productora que quiere hacer programas. Y hablando de la labor de este Gobierno con la televisión, creo que han dado unos pasos muy acertados y correctos.

P. ¿Mérito de sus amiguitos de Moncloa y aledaños?

R. No. Yo creo que el Gobierno tenía una serie de ideas muy claras que quería adoptar, y una de ellas era ésta.

P. ¿Disfrutó más estudiando música en Boston o presentando los cuentos de Ana Botella?

R. El libro de cuentos de Ana Botella salió en un momento en el que hacía falta ese tipo de lectura. Pero siempre que me comparan algo con la música...

P. ¿Su relación con ella guía sus pasos en temas de piedad?

R. No. Ana Botella tiene su vida y yo, la mía. Aquello fue un acto puntual. Yo no soy monoaural. No sabría decir: estoy de acuerdo con el 100% del PSOE, del PP o de Izquierda Unida. Como, además, entiendo lo justito, prefiero dar un paso atrás e intentar amueblar mis ideas lo mejor posible.

P. Si lo de Botella fue episódico, no se haría usted, por ejemplo, legionario de Cristo.

R. Ni soy legionario ni soy del Opus. No sé por qué se ha dicho eso. Respeto todo tipo de fe.

P. ¿A qué hora va a misa los domingos?

R. A la una, cuando puedo, o si no a las doce.