La Comunidad Valenciana es la segunda con más mujeres muertas por violencia doméstica

Desde el 1 de enero de 1999 hasta el 30 de septiembre de 2004, 63 mujeres perdieron la vida en la Comunidad Valenciana a manos de sus compañeros sentimentales. La autonomía valenciana es la segundo, después de Andalucía, con más víctimas mortales por violencia doméstica durante los últimos cinco años y mantiene una de las tres tasas más altas de violencia contra la mujer en España. Sólo Baleares y Canarias se sitúan por delante. Así lo refleja el informe de la Fundación Mujeres remitido al Consejo General del Poder Judicial y a los Colegios de Abogados.

Sobre una población superior a los 21 millones de mujeres en toda España, 443 murieron en los últimos cinco años víctimas de la brutal agresión de sus parejas. En ese balance total, 89 corresponden a Andalucía, sobre una población de 3.734.213 mujeres. En segundo lugar se sitúa la Comunidad Valencia, con 63, sobre una población femenina de 2.114.748 personas. Cataluña, con 60 víctimas, y Madrid, con 59, se sitúan inmediatamente detrás.

Esa segunda posición respecto al número de muertes se convierte en tercera al poner en relación directa las víctimas y la población. Esa combinación otorga la primera posición a Baleares, que ha registrado en los últimos cinco años una tasa del 3,86 por millón de mujeres. En segundo lugar se sitúa Canarias, con un 3,84 por millón. Y en la tercera posición, la Comunidad Valenciana, con un 2,71 por millón. Las posiciones cuatro y cinco las ocupan La Rioja (2,62) y Andalucía (2,17). La media nacional desde el 1 de enero de 1999 al 30 de septiembre de 2004 está en el 1,93 por millón de mujeres.

El informe tiene registrados los datos de los tres primeros trimestres de 2004. De ellos se desprende que, a 30 de septiembre de este año, la Comunidad Valenciana era la autonomía con la tasa más alta de muerte de mujeres por episodios de violencia doméstica de España, con un 8,04 por millón de mujeres; seguida de Murcia, con un 5 por millón; Aragón, con un 4,93 por millón de mujeres; Baleares, con un 4,72, y Canarias, con un 4,70. La tasa registrada en los nueve primeros meses de 2004 es más del doble que la media nacional, situada en el 3,60.

El retrato que sitúa a la Comunidad Valenciana como la segunda autonomía con más muertes por violencia doméstica en España en el acumulado desde el 1 de enero de 1999 hasta el 30 de septiembre de 2004 se corresponde con la actividad judicial en denuncias por malos tratos y en órdenes de protección solicitadas por las víctimas. En los nueve primeros meses del año, los juzgados del territorio valenciano han recibido 3.392 solicitudes de órdenes de protección, lo que sitúa a la comunidad entre las cuatro de mayor actividad en ese capítulo, por detrás de Cataluña, Andalucía y Madrid. De ellas, los jueces han acordado 2.848, el 83%. A esas órdenes de protección se suman 602 medidas civiles adoptadas en atribución de la vivienda; 507 que regulan la comunicación con los hijos; 487 que fijan la prestación por alimentos, y 33 sobre protección de un menor para evitar una situación de peligro derivada del conflicto entre los adultos.

En este último capítulo de protección de menores en riesgo por situaciones de violencia doméstica, la Comunidad Valenciana ha dictado más del 12% de todas las órdenes de España desde enero hasta septiembre, sólo superada por Andalucía y Cataluña. La cifra que sí comparte el territorio valenciano con la media nacional es la que recoge el porcentaje de denuncias por malos tratos que se retiran, el 10%.

Las posiciones de cabeza en las que está la Comunidad Valenciana tanto en víctimas mortales por violencia doméstica como en solicitudes de órdenes de protección han merecido comentarios por parte de jueces y abogados. Desde las Audiencias y el Tribunal Superior de Justicia se insiste en aumentar los efectivos disponibles, materiales y humanos, para que las distintas denuncias puedan ser abordadas sin los riesgos a los que, según ellos, se ve sometida la tramitación por los tiempos tan escasos que marcan los juicios rápidos. Al tiempo, las asociaciones de mujeres y los colegios de abogados, el de Valencia al frente, reclaman que la protección no sea sólo una medida restrictiva para el agresor sino que garantice la seguridad de la víctima. Fernando Alandete, decano del Colegio de Abogados de Valencia, considera que los datos de víctimas mortales en cinco años "demuestran que tenemos aún mucho camino por recorrer y que los dispositivos puestos en marcha hasta ahora deben necesariamente revisarse tanto en la fase preventiva como en la judicial".