Un trabajador muere en una demolición promovida por el Ayuntamiento de Granada

Guillermo Estalin, de 29 años y de nacionalidad ecuatoriana, murió ayer en Granada tras quedar sepultado por un muro que se derrumbó durante la demolición de un inmueble promovida por el Ayuntamiento de Granada. Un compañero del trabajador sufrió heridas leves en el siniestro. Ambos obreros realizaban labores de limpieza en una ladera sin apuntalar. El accidente se produjo en pleno centro. El Ayuntamiento ejecutaba la obra tras la negativa del propietario a realizar la demolición, pese al estado de ruina del edificio. Los trabajos fueron subcontratados.

Según uno de los obreros que trabajan en la obra, el fallecido tenía una esposa y tres hijos en su país. Llevaba 15 días empleado en la demolición "sin contrato ni papeles", informa Efe. El compañero herido es vecino de Granada y fue identificado como J.L.O.H.

Los hechos ocurrieron sobre las 15.00 en el número 16 de la Cuesta de Gomérez, en la subida a la Alhambra. Según los testigos, el trabajador fallecido se encontraba en un andamio junto a un compañero que pudo agarrarlo, aunque se le escapó de las manos cuando se produjo un segundo derrumbamiento. Durante tres horas, los bomberos, ayudados por una máquina excavadora, intentaron encontrar con vida al joven obrero. Utilizaron hasta tres perros, pero el trabajador había fallecido cuando lo encontraron sepultado por los escombros.

La empresa para la que trabajaba el fallecido fue subcontratada por Rehabilitaciones y Demoliciones de Granada, la empresa adjudicataria del derribo promovido por el Ayuntamiento de forma subsidiaria, informa Efe. El propietario del inmueble se negó a asumir los trabajos, pese a los numerosos requerimientos municipales y un largo expediente de ruina, que se prolongó durante más de dos años.

El alcalde de Granada, José Torres Hurtado(PP), y el concejal de Urbanismo, Luis Gerardo García Royo, acudieron al lugar del suceso y anunciaron una investigación. Según el edil de Urbanismo, la empresa adjudicataria subcontrató a otra y dudó si ésta hizo lo mismo con una tercera sociedad, para la que trabajaba el joven fallecido. La investigación abierta intentará delimitar si esta cadena de subcontrataciones es legal y si se adoptaron las medidas de seguridad pertinentes, algo que cuestionario los representantes sindicales que acudieron al lugar de los hechos. Éstos anunciaron movilizaciones tras el accidente número 11 de este año.

El Ayuntamiento está en pleno proceso de comunicación de ejecuciones subsidiarias a más de 1.200 propietarios de edificios en ruina. En la mayoría de los casos, los propietarios prefieren dilatar la actuación y esperar que se caiga el edificio.

Técnicos municipales revisaron ayer los edificios contiguos a la zona del siniestro, el hotel Puerta de las Granadas y un comercio, ya que al parecer "se ha generado presión en los cimientos y alguna grieta en el establecimiento", según dijo el edil de Urbanismo. La parte del muro que quedó en pie se recubrió con una malla para evitar nuevos desprendimientos.